EN EL DEBATE / Dolores de cabeza... y de bolsillo

Carlos R. Villarreal Antelo

El 1 de enero entraron en vigor cambios a las leyes impositivas de nuestro país que tendrán impactos negativos tanto para las empresas como para las personas físicas, en especial las que pertenecen a la clase media, por las siguientes razones:

- Las reformas descansan fundamentalmente en tres principios: aumentar las tasas impositivas; eliminar o limitar las deducciones y algunos regímenes que concedían beneficios a sectores estratégicos, y establecer nuevos impuestos, todos ellos dirigidos a los contribuyentes cautivos.

- No se aprobaron medidas de fondo que combatan la economía informal, que de acuerdo con datos del INEGI representa el 60% de la economía. El Régimen de Incorporación parece una medida de poca efectividad para incorporar a la tributación a quienes han operado en la economía informal.

- No se privilegió la generación de empleo ni se estimuló la inversión productiva; por el contrario, se establecieron restricciones para la deducción de los sueldos y las inversiones.

En este sentido, las reformas que más incidirán en los contribuyentes son, entre otras, las siguientes:

  1. - La limitación para las empresas que pagan sueldos, ya que únicamente podrán deducir el 47% de los importes pagados a sus trabajadores por aquellos conceptos que sean exentos para éstos en materia del impuesto sobre la renta. Indudablemente esta limitación resulta a todas luces injusta, puesto que los empleadores no tienen que verse afectados por los beneficios fiscales otorgados a los trabajadores.

  2. - El sector maquilador es el primer generador de empleos formales registrados ante el IMSS, y con las reformas aprobadas se establecieron medidas administrativas y recaudatorias que complican su actividad, y que demandarán mayor capital para su operación. Aunque se han dictado medidas para atenuar o diferir estos efectos, el cambio es trascendente.

  3. - Establecer un impuesto sobre la renta, a la tasa del 10%, al pago de dividendos a personas físicas y residentes en el extranjero, encarece el sistema tributario mexicano: desalienta la llegada de inversión extranjera al País.

  4. - El aumento en la tarifa aplicable a las personas físicas que se incrementan del 30% hasta un máximo de 35%.

  5. - La limitación de las deducciones personales de las personas físicas, que no podrán exceder de 94 mil pesos.

  6. - La creación, en el impuesto especial sobre producción y servicios, de dos nuevos impuestos: uno de un peso por litro en la enajenación de...

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