Coordenadas/ La fragilidad de las expectativas
| Autor | Enrique Quintana |
Está o no está sobreva uado el peso frente al dólar? Si esta pregunta se hace a diversos exportadores, la respuesta que se obtiene es invariablemente positiva.
Si la interrogante es formulada a las autoridades, la respuesta es, también invariablemente negativa, pues dicen que en un régimen cambiario de libre flotación no puede haber sobre o sub valuación en el sentido en el que usualmente se entiende, pues el mercado es el que define el precio del dólar.
Así que, ¿a quién darle la razón? Solución salomónica: ninguno la tiene por entero aunque cada uno ofrece parte de ella.
¿Cuál es la parte correcta del argumento de los exportadores?
Es absolutamente cierto que las empresas exportadoras que incorporan una proporción elevada de insumos y servicios nacionales están enfrentándose a problemas pues sus costos en pesos han ido para arriba los dos últimos años, mientras que sus ingresos en dólares se han movido mucho más lentamente.
Pero las exportaciones de manufacturas siguen al alza. ¿Por qué? Hay por lo menos tres factores en la respuesta:
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-Las exportaciones tienen una escasa integración nacional por lo que una proporción muy baja de sus insumos totales se valúa en pesos. Las compras en dólares compensan las ventas en dólares. Por eso, aunque las exportaciones crezcan a tasas anuales de más del 15 por ciento, tenemos déficit.
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-La dinámica del mercado norteamericano ha sido determinante del éxito exportador mexicano. Si en la última década el apetito de importaciones de la economía norteamericana no hubiera sido tan voraz, la historia de las exportaciones mexicanas hubiera sido otra.
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-El acceso al financiamiento de las empresas exportadoras es mucho más amplio, de modo que la capacidad de crecimiento que tienen es mucho mayor y el propio tipo de cambio estable contribuye a costos financieros más bajos.
Para ponerlo de manera más provocadora, resulta que la persistencia del éxito exportador deriva en alguna medida de la falta de integración de las empresas exportadoras al mercado interno. Si la proporción de insumos nacionales fuera más alta o si hubiera una mayor dependencia a las fuentes domésticas de financiamiento, ya se hubiera dado un buen tropezón la industria exportadora.
Esto no quiere decir que algunos de los pequeños y medianos exportadores no se vean excluidos del juego con el fortalecimiento de nuestra moneda.
Pero entonces, ¿es cierto que no hay sobrevaluación del peso?No del todo.
Los cálculos tradicionales que miden la...
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