Abastos: Para todo gusto
| Autor | Luis Durán |
En el mercado no sólo hay bodegas especializadas en la comercialización regional de productos frescos. También cuenta con oferta gastronómica y hasta tiendas de productos gourmet.
Los sabores del mundo
Luis Durán
Además de ofrecer frutas, verduras, carnes y un extenso surtido en alimentos no perecederos, el Mercado de Abastos de Guadalajara también guarda un secreto para atender a los paladares más exigentes.
Hace dos años que Juan Muro abrió un pequeño local en el área de tianguis del mercado, llamado Abastos Gourmet, especializado en la venta de productos importados como aceite, arroz, quesos, especias, vinagres y pastas.
"Hemos empezado hace dos años y ya se logró un mercado atractivo, la gente viene y tratamos de tener toda la variedad que la gente necesita para una buena cocina", indicó el locatario.
La inquietud de iniciar este negocio se debe al gusto de Muro por la cocina y a que se ha dedicado por más de 20 años a la importación de productos gourmet.
"Nos gusta cocinar y manejamos algo de productos importados. Importábamos antes, se logró hacer entre las ganas de cocinar y el conocimiento de cómo importar, juntamos todo", dijo el comerciante.
En este local se pueden encontrar productos para cocinas como la francesa, italiana, árabe, japonesa, coreana, peruana, libanesa, entre otras.
Debido a que en este lugar se pueden encontrar objetos que difícilmente se encuentran en una abarrotera común, el precio de los productos está al alcance sólo de los paladares exigentes.
Por ejemplo, uno de los productos que más valor tiene es una botella de aceite de trufas de 100 mililitros, la cual tiene un precio al público de 340 pesos. A ese mismo precio, en la tienda Abastos Gourmet también se vende el kilo de queso de oveja libanés.
Uno de los retos del locatario consiste en satisfacer la necesidad de sus clientes, en su mayoría restaurantes de comida extranjera, pues hay productos que se le dificulta importar.
"Se nos complica a veces los productos hindúes, las lentejas que piden, eso es lo que a veces se nos complica, como no conocemos el producto no sabemos cómo pedirlo. Como vienen y hablan en su idioma no sabemos qué es", señaló Muro.
"A veces demoramos hasta dos meses, demoramos 15 días porque son cosas que no las hay, pero sí tratamos de conseguir todo lo que nos piden".
Aunque el locatario inició con 150 productos en inventario hace dos años, ahora su oferta llega a los mil 300 artículos de cocina, y la idea es seguir ampliándola.
Con...
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