Administración de Tecnología / Ubícate antes de navegar

AutorEnrique Canales

Meterte a navegar a internet tiene el peligro de caer atrapado en temas y portales interesantes, pero que al final no obtienes nada a cambio sino tan sólo perder lastimosamente el tiempo.

Conviene recordar que la voluntad debe ser el timón de la inteligencia y la inteligencia debe ser el timón de los ojos. Si dejas que los ojos busquen por su cuenta siguiendo su instinto animal, se van a dirigir a lo llamativo, a lo colorido, a lo movido, a lo apantallante. Ahora bien, si permites que la inteligencia cristalina dirija a tus ojos, entonces tus ojos se van a entretener en lo intrigante, en lo curioso desde el punto de vista capcioso y en las cosas interesantes del mundo. También la inteligencia es atraída por las preguntas retadoras, los enigmas y por lo novedoso.

Total, ni lo llamativo, lo colorido, lo movido, lo apantallante, lo intrigante, lo curioso, lo capcioso, ni lo interesante, ni lo retador, ni lo enigmático, ni lo novedoso, puede ser más importante que nuestro valioso tiempo para hacer algo. Entonces ni los ojos sueltos, ni la inteligencia suelta, son confiables para navegar en internet. Para sacarle provecho al tiempo dedicado a internet necesitamos el timón de nuestra santa voluntad.

La voluntad es el timón de nuestra inteligencia y debería fijar el objetivo de lo que andamos buscando en internet. El internet es una herramienta enorme, que merece estudiarse para sacarle el mayor provecho posible. Una vez, tuve la oportunidad de entrar a la Biblioteca de Nueva York. Sentí que ahí, fácilmente me podría quedar escudriñando libros por un mes. El internet es ahora mil veces más grande que esa Biblioteca y cien veces más fácil de escudriñar. Navegando en internet podemos durar años; hasta volvernos estúpidos y ciegos.

Es claro que si el objetivo es meternos a internet para entretenernos y perder el tiempo, bueno, entonces entre menos voluntad pongamos, más atontados vamos a andar, que es lo que andábamos buscando. Además internet nos brinda la excusa de que parece como que estamos haciendo algo, cuando en realidad estamos vagando y flojeando de lo lindo.

Entonces, antes de meternos a internet convoquemos a nuestra voluntad, para determinar exactamente qué es lo que estamos queriendo hacer y lograr, el fin justifica el medio y el medio le va a poner límites al fin. Es decir, la voluntad...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR