Agrava huracán 'Greg' miseria de indígenas

AutorMario Gutiérrez y Pedro Mellado

Considerado el séptimo Municipio más pobre del Estado y con cerca del 50 por ciento de su población viviendo en la pobreza, Cuautitlán tiene un presupuesto insuficiente para combatir los rezagos en infraestructura y empleo que tienen las localidades, consideraron autoridades locales.

En condiciones ancestrales de atraso social, la situación económica no ha mejorado y el alcoholismo, así como el impacto del huracán "Greg" han contribuído a agudizar la miseria de los pobladores.

El Alcalde Esteban Arias, reconoció que aún es necesario un mayor trabajo para abatir la pobreza de la zona. En estas condiciones los más afectados son los indígenas, porque de acuerdo con las estadísticas, de los 16 mil habitantes que tiene el municipio, cerca del 60 por ciento son de origen nahua.

La comunicación entre rancherías y con la cabecera municipal es difícil. Un camino de terracería une en temporada de secas a las localidades, pero durante las lluvias las partes bajas son intransitables por el aumento de las corrientes en los arroyos.

Las casas son construidas de adobe o madera, que en el mejor de los casos están protegidas por techos de lámina. La mayoría de las viviendas son de una recámara y una cocina en la que también se habilita el comedor.

Durante la mañana el humo del fogón de leña traspasa los techos y se cuela por las hendiduras. La alimentación está basada en frijoles, tortillas y de vez en cuando un poco de carne.

La riqueza de la zona ha permitido que los habitantes de la serranía aprovechen los manantiales para sembrar durante todo el año. En la mayoría de los casos la cosecha se destina al consumo personal, porque si se trata de vender los precios son muy bajos.

Un productor de café en la sierra de Cuautitlán pone un ejemplo de cómo su cosecha es subvaluada: "Si la producción vale 3 pesos me pagan la mitad, es decir 1.50".

Lo mismo sucede en el poblado de Manantlán, donde David Arciniega tiene que ir hasta El Grullo para comercializar su maíz, que es pagado a mil 250 pesos por tonelada, cantidad que apenas le alcanza para recuperar los gastos de la siembra.

Las necesidades son de todo tipo en esta amplia zona de bosque. Beato Chávez vive en Telcruz, la comunidad indígena más numerosa. Su actividad agrícola la combina con el comercio de abarrotes que trae desde Colima.

Este hombre reprochó que no exista apoyo a la ganadería ni a la...

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