Analizan la evolución urbana

AutorEnrique Gonzalez y Aimeé Muñiz

El japonés Toyo Ito fue el encargado de ofrecer la primera ponencia del Segundo Congreso Internacional de Arquitectura que inició ayer en la sede del Tec de Monterrey Campus Guadalajara.

Optó desde el principio por dejar en claro su profundo respeto por el medio ambiente, ya que la primer diapositiva que mostró fue la de su pueblo natal, Nagano, ubicado a las orillas de un lago.

Esta circunstancia influyó para que, a lo largo de su trayectoria, el agua fuera un elemento permanente en sus trabajos.

"Crecí junto a un lago en Nagano, siempre mirando el agua, así que siempre estará muy presente en lo que hago", afirmó Ito.

Exponiendo sus ideas en japonés y con la ayuda de traductores, Ito fue llevando al auditorio a un recorrido por varias de sus obras monumentales, tales como el edificio PMT, en Nagoya, o la Estación de Bomberos, en Kumamoto.

La premisa básica de Ito para plantear cualquier proyecto es que la naturaleza se debe ver reflejada en su obra. Ambas partes deben convivir de manera armoniosa, sin que una se destaque sobre la otra y procurando en todo momento no perder de vista las necesidades propias de la comunidad.

Así, Ito recurre a varios mecanismos para lograr su objetivo, desde la combinación de materiales que reflejen el entorno del lugar, ya sea aluminio o madera, hasta la adecuación de las edificaciones con el aire, la luz, el clima o el viento.

Debe dialogar con su medio.- Mignucci

La obligación de los arquitectos de hoy es establecer un diálogo con los espacios, antes de la intervención o construcción de un edificio. Hay que leerlos, conocer sus características simbióticas y la relación con el entorno que lo rodea, señaló Andrés Mignucci en la segunda ponencia de la jornada, titulada "Habitando Sombras".

Se refirió a la importancia de mantener un diálogo constante, de manera que el edificio pueda tener una comunicación con su entorno, pero ante todo que se integre a éste satisfaciendo las necesidades de quienes serán sus moradores.

En el caso de San Juan de Puerto Rico expresó que es fundamental entender a la luz respondiendo a su contraparte: la sombra.

Y es que para Mignucci la sombra es lo que el agua para Toyo Ito. Es un elemento que no puede pensarse de manera aislada a la arquitectura, es decir, ésta debe trabajarse con base en la sombra.

Agregó que no es posible concebir la arquitectura "como suspendida en el tiempo", es decir, es necesario pensarla para cualquier momento del día, de manera que tanto en el día como...

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