Para animarse con México

AutorRogelio Elizalde

Muchos extranjeros admiran la belleza mexicana que a veces para nosotros pasa desapercibida. Una semana basta para conocer alguna de estas joyas mexicanas de talla mundial: bodegas californianas con vinos que compiten con cualquiera; un oasis de fauna y flora endémica en uno de los mayores desiertos en la Tierra; cascadas petrificadas que sirven como cálido balneario; y un refugio artístico en la selva que hasta la fecha sigue siendo referente del movimiento surrealista.

CASCADAS PÉTREAS

Son los dos únicos sitios en el mundo cuyos manantiales, al escurrir por miles de años, formaron unas cascadas de carbonato de calcio residual.

HIERVE EL AGUA, OAXACA

En la serranía, 60 kilómetros al este de la capital oaxaqueña, rumbo a Mitla, las cascadas petrificadas de Hierve el Agua son un rincón de aire puro y naturaleza.

Los manantiales siguen brotando y llenando las pozas,algunas pequeñas, de unos cuantos centímetros, pero también otras de varios metros de diámetro .

Desde la orilla de la primera cascada se ve la del fondo, lo que hace una gran foto, pero la recomendación es ir luego a la segunda, desde donde se toman las panorámicas más espectaculares.

TOMA NOTA

Cómo llegar: Hay que volar a Oaxaca, vía DF, por Volaris, Interjet o Aeroméxico. De ahí tomar transporte terrestre.

Dónde hospedarse: Casa Oaxaca. Es una opción lujosa y boutique con sólo 9 habitaciones, que comienzan en 2 mil 850 pesos por noche para dos personas. El Hostal Casa del Sol cuenta con habitaciones dobles desde 450 pesos.

Qué probar: Una nieve afuera de la Basílica de la Soledad.

Imperdible: Bajar por la segunda cascada de Hierve el Agua y caminar por todo el sendero que rodea la zona.

oaxaca.travel

PAMMUKALE, TURQUÍA

Imperdonable no visitar estas aguas termales si se pasa por Turquía, ya que está a tres horas en auto de la ciudad costera de Izmir, vecina de las islas griegas, o a una de vuelo desde Estambul. Incluso en invierno la visita es agradable, ya que las aguas fluctúan entre los 35 y los 100 grados centígrados.

Desde que el sitio fue declarado Patrimonio de la Humanidad se prohíbe usar zapatos al recorrer las pozas, así que hay que hacerlo con precaución, ya que las terrazas de sedimentos travertino son resbalosas.

El blanco predomina de tal forma que parece nieve, aunque dentro de las pozas hay arena suave que relaja a los bañistas.

Cómo llegar: Desde el DF Air France vuela a Estambul vía París y Lufthansa vía Ámsterdam.

INSPIRACIÓN SURREALISTA

Estos jardines tuvieron...

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