Ataques sin restricciones

AutorTania Casillas

De los 26 feminicidios contabilizados en 2018, 6 se cometieron con arma de fuego, 7 con arma blanca y 13 con algún otro objeto no especificado, según revelan las estadísticas de la Fiscalía.

Asimismo, otros datos de la Secretaría de Salud (SS), revelan que las mujeres lesionadas por sus parejas, sus padres u otro familiar, fueron atacadas con los pies o con las manos; también golpeadas contra el piso o la pared; fueron sacudidas o las intentaron asfixiar.

"En realidad un número alto de mujeres son asesinadas con las propias manos, es decir son estranguladas, son golpeadas, son vejadas con las manos", lamentó la titular de Cladem, Guadalupe Ramos.

Incluso, en las atenciones en diversos centros de la SS, cuatro mujeres fueron agredidas con maquinaria y seis más con corriente eléctrica, pero sólo en una situación de éstas últimas se involucró a la Fiscalía.

"La violencia empieza con manifestaciones a veces muy sutiles de gritarle, ofenderla, menospreciarla, quitarle el dinero, manipularla, chantajearla y se va acrecentado", explicó por su parte la Doctora en Estudios Científico-Sociales, Paola Lazo Corvera.

Desglosó que la manera de violentar a las mujeres está relacionada con un desequilibrio de las relaciones de poder.

"A la hora de tener el control, el hombre naturaliza este control y siente a la mujer, en mucho de los casos como su propiedad, se siente dueño de las decisiones, de la vida, del cuerpo", enfatizó Lazo Corvera.

Por su parte, la terapeuta Yumico Veliz, lamentó que las mujeres que son violentadas sienten que dependen de los hombres que las atacan.

Por lo anterior necesitan que la gente a su alrededor les haga ver que están vulnerables y que corren peligro.

"Ningún libro...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR