'Bailan' valets a los usuarios

AutorValeria Huérfano

Pagar el boleto del valet parking seguramente es más costoso que un estacionamiento y no es garantía de que le estén prestando el servicio adecuado.

En línea amarilla, contra sentido, obstruyendo cocheras y hasta en doble fila, así dejan su automóvil.

En el caso de la Colonia Americana, las obligaciones que se especifican en los boletos entregados por las empresas acomodadoras de autos a los clientes son letra muerta.

En un ejercicio de MURAL el miércoles 13, los valet parking de tres restaurantes dejaron los autos en lugar prohibido, o bien, incurriendo en otras faltas al Reglamento de Estacionamiento de Guadalajara.

En uno de los casos, el acomodador dejó el auto frente al negocio, pero en línea amarilla; en los otros dos, después de pasarse semáforos y conducir a alta velocidad, lo colocaron frente a comercios, sin vigilancia y sin las medidas de seguridad que marca la norma.

La noche del 15 de agosto, en Providencia, reinó la anarquía, los acomodadores se adueñaron de las calles.

De seis lugares, sólo uno dejó el auto en un predio usado como estacionamiento, pero ese no aprobaría una supervisión apegada al reglamento, porque el lugar no era vigilado.

En otros, los acomodadores dejaron el auto mal estacionado, según regulaciones de la Ley de Movilidad.

Unos se llevaban el auto y recorrían varias cuadras buscando un espacio cualquiera.

Todos los colocaron en zona prohibida para estacionarse: algunos en línea amarilla, otros en la esquina, obstruyendo paso peatonal y rampa, o en doble fila.

Los acomodadores afirmaron...

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