Para Voy al Teatro, 2020 fue un año de definiciones. La plataforma tapatía de venta de boletos, especializada en artes escénicas, debió reconvertirse, ser un escaparate para contenidos locales y nacionales y así asegurar su sobrevivencia.
Aunque el inicio de la pandemia fue complicado por la cancelación masiva de actividades, el teatrista Alan Gutiérrez, fundador de la plataforma, buscó alternativas para ampliar y consolidar el negocio: habilitó una sala virtual con una docena de obras de teatro, que ha llegado a vender hasta dos mil boletos en una sola función.
"Todo este caos nos obligó a entrar sí o sí en un ejercicio de creatividad, para replantearnos cómo continuar y de qué forma, porque en nuestro sector los proyectos se caen muy fácilmente o son muy frágiles, particularmente los proyectos como Voy al Teatro, que son de otra naturaleza, que tienen que ver con la promoción, difusión y comunicación, tienden a ser muy vulnerables.
"En ese escenario ideamos una sala virtual y se volvió una herramienta, un estandarte muy importante, se convirtió en el proyecto central de 2020, a partir de ahí buscamos más posibilidades que tienen las artes escénicas a través de internet, empezamos a hacer cosas que no hacíamos antes, como alimentar de forma continua un blog, empezamos a...