Tiene Daniel sueño: un riñón nuevo

AutorMariana Jaime

Las desgracias nunca vienen solas, dicen por ahí, y así parece ser en el caso de José Daniel Nieves Báez y su familia.

Hace siete años, cuando Daniel tenía 21 años, se le diagnosticó insuficiencia renal crónica bilateral y desde entonces modificó todos sus hábitos.

Pero, con todo y los cuidados, el deterioro de sus riñones avanzó y el año pasado fue necesario iniciar la terapia de remplazo mediante hemodiálisis.

En mayo comenzó el protocolo para trasplante, pues había convencido a su hermana de ser su donadora, sin embargo, ella desistió y Daniel pidió que lo ingresaran a la lista de espera de donación cadavérica.

Sus constantes citas médicas lo hicieron perder el trabajo y con ello su afiliación al Seguro Social, por lo que sus primeras sesiones de hemodiálisis fueron costeadas por él, hasta que le tocó el turno para ingresar a la unidad del Hospital Civil Juan I. Menchaca, donde paga 400 pesos por las dos citas para limpiar su sangre.

Daniel se casó en septiembre pasado, todavía para esas fechas había algo de trabajo con su papá, Faustino Nieves, en la herrería, pero apenas inició el 2013 y la producción bajó.

Daniel y su esposa, Iveth Nayely González, viven con los papás de él. Su mamá, Luz Elva Báez, se dedica al hogar, por lo que los únicos ingresos con que cuentan son los pocos que saca don Faustino en el negocio y lo que gana Iveth como obrera.

El protocolo de trasplante está casi completo, pero, aunque estuviera concluido y llegara un riñón para Daniel, todavía no podría recibirlo, por falta de dinero.

La cirugía tiene un costo de casi 73 mil pesos, más 25 mil pesos que debe cubrir por los cinco días que pasaría en el...

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