EN EL DEBATE / Rumbo a la reforma fiscal
Jesús Casillas Romero
Sin duda alguna, los ingresos fiscales y los presupuestos públicos son de gran importancia para la vida de toda nación. Constituyen el motor para el funcionamiento y desarrollo del País, al sustentar el gasto del Estado mexicano.
Hoy vivimos en México un momento histórico de grandes cambios. El Gobierno que encabeza el Presidente Enrique Peña Nieto impulsa todos aquellos que redunden en el bienestar de la población. Por ello, los recursos económicos resultan indispensables para lograrlo. En esa dinámica es que ha propuesto un paquete económico para el Ejercicio Fiscal 2014, acompañado de reformas de peculiar trascendencia.
Con la propuesta fiscal planteada, el Estado contará con más recursos económicos, mas lo importante de esto es cómo se usarán y a qué se destinarán. A ese respecto, es claro que el Gobierno de la República promueve la aplicación del gasto público con un enorme sentido social.
Una Ley de Pensión Universal para adultos mayores de 65 años, para atender a aquellos que no cuentan con una pensión de retiro, y se hará mediante la entrega de apoyos económicos y de protección social.
La Ley del Seguro de Desempleo, para que la persona que se sitúe en este supuesto pueda recibir pagos económicos de hasta el 60 por ciento de su salario cotizado.
El Seguro de Vida para Madres Jefas de Familia, con la finalidad de disminuir la condición de vulnerabilidad que enfrentan los hijos e hijas de hasta 23 años de edad en hogares con jefatura femenina con ingresos inferiores a la línea de bienestar, ante el fallecimiento de sus madres.
La conformación de un Sistema Universal de Salud que habrá de completarse con la iniciativa que el Presidente presentará en unos meses.
El fortalecimiento de programas sociales, como el de Vivienda Digna y Oportunidades.
Mayores recursos a la educación, incluso, con más escuelas de tiempo completo para beneficiar a más de 2 millones de alumnos; y mayor cobertura en educación media y superior. Un programa nacional de becas, subsidios para universidades públicas, así como un nuevo programa de excelencia académica para abatir el rezago educativo.
Una mayor inversión en infraestructura social y en ciencia, tecnología e innovación.
El lanzamiento de un programa piloto para dotar de computadoras portátiles a alumnos de quinto y sexto año de educación primaria.
El impulso al crecimiento de la economía con reasignaciones de gasto público para acelerar la obra pública en los Estados, un fondo de...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba