Un día increíble
| Autor | Luis Alberto Aguirre |
Cuando los planeta se alinean no hay nada que pueda impedir que las cosas se den, aún cuando una desastrosa calificación el día previo indique que el podio no es factible.
Esto lo vivió ayer Fernando Alonso, quien de forma inesperada y con base en un manejo espectacular y un poco de suerte, se llevó un inolvidable triunfo en el Gran Premio de Europa, en Valencia.
Alonso se convirtió en el primer hombre en ganar dos Grandes Premios en el 2012, retomó el liderato del Campeonato del Mundo y dejó sentado que hoy es el mejor piloto de la parrilla.
El asturiano partió en el lugar 11 y desde la arrancada enloqueció a las tribunas, repletas de españoles vestidos de rojo, al poner el Ferrari en el octavo sitio.
Desde ahí, con la paciencia que lo ha caracterizado durante el año, fue recuperando posiciones poco a poco hasta que, sin esperarlo, ya peleaba el top 3.
"Tuvimos una carrera increíble, un gran comienzo. Recuerdo seis o siete rebases que hicimos. Tuvimos todos los factores y la suerte con nosotros", expresó Alonso.
Mientras eso ocurría, Sebastian Vettel comandaba desde la pole con autoridad y sacaba una ventaja abismal sobre Romain Grosjean, quien marchaba segundo, pero en el giro 29 un incidente que involucró a Jean Eric Vergne y a Heiki Kovalainen obligó el ingreso del safety car.
Durante el periodo del encadenamiento, Alonso comenzó a implorar por la caída de la bandera a cuadros, sin imaginar lo que le esperaba.
Dos vueltas después del reinicio, Alonso pasó a Grosjean por el segundo sitio, y, poco después, Vettel, quien dominaba a placer, abandonó por problemas en el auto.
"Cuando estás tercero detrás del safety car yo dije: 'Espero que caiga la bandera a cuadros ahora y disfrutar la celebración de este podio'. Pero dos vueltas después pasé a Grosjean y en el reinicio, entonces, Vettel paró y fue una carrera muy larga desde ese punto", expresó el español.
La suerte no paró ahí para el dos veces campeón del mundo, quien era presionado por Grosjean, el único que podía mantener la racha de ganadores distintos en la temporada. De pronto se vio en solitario, pues un problema eléctrico acabó con la carrera del francés.
A un par de vueltas del final, Kimi Raikkonen pasó Lewis Hamilton por el segundo sitio y el británico después terminó en la barda tras un contacto con Pastor Maldonado, lo que permitió al alemán Michael Schumacher subir a su primer podio desde que regresó a la F1, en el 2010.
Así se formó un podio de antología, con tres campeones...
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