Eduardo Caccia / El genio estridente

AutorEduardo Caccia

Siendo un niño, Eddie llegó como inmigrante a Estados Unidos, desde su natal Holanda, en una travesía interoceánica de nueve días. En el haber de la familia Van Halen había esperanza, un piano y cincuenta dólares, incipientes recursos para comenzar una vida en California en aras del sueño americano.

El padre de Eddie, músico clásico, tocaba clarinete y saxofón, habilidades sobradas para ejercer como portero en un templo mormón, mientras su esposa trabajaba de sirvienta. Al ser minoría étnica, Eddie y su hermano Alex sufrieron violencia racial en la escuela. Su refugio fue el piano en el que tomaron clases. Durante cinco años Eddie engañó al maestro: no sabía leer la partitura, aprendía de memoria. Desde entonces las manos del pequeño músico mostraron el talento de alguien nacido con inteligencia en los dedos, aunque incapaz de leer instrucciones.

Al crecer, los hermanos encontraron eco en la rebeldía del rock y sus excesos. Decir que luego de incontables esfuerzos y vaivenes se convirtieron en la mundialmente famosa banda de heavy metal Van Halen, no es lo trascendente. Eddie quería tocar la batería, sitio que Alex ocupó, así que tuvo que conformarse con la guitarra eléctrica, dato fundamental para la anécdota pues Eddie Van Halen se convirtió en uno de los mejores guitarristas del rock, y no sólo eso, es considerado el exponente más innovador en guitarras eléctricas. Entender su perfil como inventor es el centro de este artículo.

En sus inicios, Eddie compró con sus ahorros partes usadas de guitarras y luego hizo una "cruza" entre una Fender y una Gibson; del icónico modelo de la primera, la Stratocaster, creó una nueva guitarra que a la postre se convirtió en objeto de culto: la Frankenstrat, "era como Frankenstein, hecha de partes de cadáveres", dijo. Una réplica de ese instrumento se exhibe, bajo los auspicios del Smithsonian, en el Museo Nacional de Historia Americana, en Washington D.C. Eddie contaba con el ingrediente más importante de un innovador: carecía de recursos suficientes para lo que quería, lo que compensó con ingenio. Sustituyó las funciones de un pedal con otro mecanismo y produjo sonidos inéditos que, junto con su nata habilidad manual, reinventaron el rock y lo catapultaron como un ídolo mundial del género metálico.

Estamos ante alguien considerado genio en su territorio, un músico disruptivo que se hizo al margen de la...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR