Entrevista / Juan de la Borbolla / Con un perfil empresarial
| Autor | Paulina Martínez |
Desde su nacimiento, a la Universidad Panamericana (UP) campus Guadalajara le ha caracterizado la preparación de alumnos con capacidad promotora de nuevas empresas, pero que tengan una actitud audaz y sensible a los problemas de los más vulnerables, comenta el Rector Juan de la Borbolla.
Este mes, a 30 años de haber abierto como institución de educación superior, la casa de estudios festeja su aniversario y se prepara para incrementar la oferta de posgrados con la mira puesta en ofrecer capacitación permanente a los profesionistas.
La UP está orgullosa de muchos de sus egresados que estudian posgrados en más de 60 países, pero no está satisfecha, señala su Rector, pues todavía falta mucho trabajo por hacer para una institución que es joven.
Al nacer la Universidad, ¿cuál fue su sello?
Siempre hemos dicho que era una Universidad que nace de grupos empresariales para satisfacer dos requerimientos que los empresarios ven mucho muy importantes. Por una parte, el que la Universidad capacite no sólo en lo técnico sino también en lo humano y yo diría, primero en lo humano a aquellos que efectivamente van a ir a trabajar a sus empresas, incluso, este modelo es el que ha hecho posible, por ejemplo, el surgimiento en otras parte del mundo e incluso en el propio México de universidades que están íntimamente relacionadas con empresas.
Hay otro componente, desde el inicio estos empresarios vieron que la Universidad Panamericana tenía que alentar en sus alumnos un sentido de empresarialidad.
¿Cómo se ubicarían en el contacto con otros sectores de la sociedad más desfavorecidos? A veces se acusa que el empresariado y también las instituciones particulares están alejadas.
Desde el inicio hicimos, y como vía de formación de nuestros alumnos, no como vía de solución a problemas coyunturales del entorno.
Qué terrible el que los alumnos no vean el México real, que no vean las verdaderas necesidades nacionales y que ellos estén pensando en que sí, la crisis está muy dura porque mi papi, y enfatizo esto, no me pudo llevar a donde quise de vacaciones.
Es parte de nuestro quehacer formativo el que se interioricen los muchachos con el problema efectivamente de las carencias materiales que están a su alrededor, ¿para qué?, para irles formando un espíritu de servicio para que ya como profesionales y con esa mentalidad empresarial y que les estamos queriendo crear, pongan su granito de arena en la solución de los grandes problemas nacionales y está en sus manos...
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