Entrevista / Inés Sainz / La mujer 'deportech'

AutorJosé Luis Adriano

¿Qué tipo de tecnología incorporas en tu vida? Eres de celulares, de videojuegos...

Yo soy más de celulares y la verdad es que para mí son una herramienta de trabajo fabulosa. Más allá de la conexión que tienes y estar conectado siempre, lo utilizo mucho porque me permite tener una rapidez increíble en mi generación de contenidos.

La parte del deporte tú sabes que es de inmediatez, de estar hablando en el minuto, en el segundo de lo que está pasando, ser la más oportuna y la que en su momento lo hace mejor. Entonces el hecho de tener a tu alcance aplicaciones como WeTransfer, que puedes generar videos de muy buena calidad, y después mandarlos y que lleguen con una muy buena señal para televisión, es una maravilla.

El hecho de poder tú misma autograbarte, no perder la emoción de ello, se me hace una herramienta sensacional... Y luego por el otro lado, si tienes la parte de mantenerte comunicada, yo en mi caso que me toca viajar tanto, todo el día estoy en FaceTime con mis hijos, con la familia, porque indiscutiblemente te hace sentir cerca de ellos, ¿no?

Tengo una hija que está estudiando en Europa y el estar todos los días hablándonos así, diario la veo, diario me ve, diario veo su carita, esa parte es para mí básica y, ¿cuándo te ibas a imaginar antes que esto pudiera llegar a pasar?

Y después, pues a mis hijos obviamente los videojuegos les encantan, les encanta Fortine, les encantan muchos otros, entonces me meto para entender su mundo, para entender qué están viendo... Que luego me pico también un poco, cosa que no me encanta porque son medio adictivos, pero la realidad es que es estar ahí, ver cómo están en este mundo tecnológico que para ellos es tan natural, tú no te desencajas ni te descomunicas, sino que sigues ahí en contacto con ellos.

¿Cuál crees que sea el rol de los padres con niños en esta época tecnológica?

Guiarlos a saberla usar adecuadamente. El entender que no todo es para todos y que también el tiempo que pasan ahí es tiempo que pierden fuera, entonces es esa parte de ayudarlos a hacer el balance. Muchas veces te dicen: "nooo, ¡yo quiero seguir jugando!" Y es: "a ver amor, no, espérate, vamos a hacer otra cosa". Creo que el rol de que entiendan que sí, es una herramienta, es un instrumento, es un juego, pero no es su vida.

Esa parte sí hay que diferenciarla bien porque es muy triste ver cómo niños se pueden pasar seis, siete horas al día en videojuegos. Lo ves y es un sedentarismo horrible y yo tan deportista, lo menos...

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