FALACIAS DEL PODER / Partidos para la democracia

AutorJesús Ibarra

Los partidos políticos son animales feos, pero imprescindibles para una democracia de calidad. Son el primer engrane que mueve al régimen político, transmiten la energía de las causas sociales a las instituciones políticas. Si no hay sorpresas de último momento, en Jalisco tendremos dos nuevos: "Futuro" y "Hagamos". El reto que enfrentan se mueve entre la irrelevancia de ser más de lo mismo, básicamente maquinarias para ganar elecciones o, si logran espacios de representación, quedar atrapados en la pragmática del poder.

Las clasificaciones tradicionales de los partidos los ordenan según su origen y funciones históricas, así, hemos tenido partidos de elites o masas (Duverger), aquellos que luchan por el mayor número de electores (los catch-all de Kirchheimer) o los partidos cártel (Katz y Mair) enfocados en lograr financiamiento y posiciones de poder e influencia. El problema de estas tipologías es que no explican la crisis actual de los partidos en cuanto al desencanto y la creciente indiferencia ciudadana hacia el mundo político, la concentración de poder en líderes populistas que los instrumentalizan o su baja afiliación, al tiempo que las élites se fortalecen en sus privilegios.

Por si fuera poco, proliferan prácticas contrarias a derechos y, decisiones de primer orden, se toman fuera de los marcos de la democracia, de forma que estamos vaciando de contenido al espacio público al despojarlo de su elemento popular. Esta es la verdadera crisis. ¿Qué tendríamos que observar en "Futuro" y "Hagamos" para saber si se asumen como partidos para la democracia?

Juan Linz expone con maestría tres paradojas a las que tenemos que poner atención. La primera se refiere a la congruencia partidista, a que la ciudadanía sepa qué esperar del partido, pero sin perder su valiosa democracia interna. El reto se encuentra en mantener cierta disciplina interna sin que ello ahogue las posiciones críticas y plurales de la militancia. Normalmente la militancia no tiene un papel relevante al definir la postura estratégica del partido, tarea encargada a la dirigencia que la define cupularmente según convenga para ganar...

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