Falta camino hacia inclusión

AutorFernanda Carapia

Cuando Ana nació, los médicos le dieron pocas semanas de vida debido a que tenía Síndrome de Down.

Inclusive, debido a que había otros bebés que necesitaban de la incubadora, la sacaron y la pusieron en una cuna con un reflector para que recibiera calor, lo que dañó sus ojos.

Hoy, Ana es una mujer a punto de cumplir 42 años. Con la ayuda de su madre, ha logrado abrirse paso al grado que pudo hacer hasta segundo de primaria en una escuela regular. Habla, corre y disfruta mucho de comprar anillos y diarios en donde guarda sus secretos.

Mercedes, mamá de Ana, consideró que hoy en día hay más apertura para los niños que nacen con este síndrome; no obstante, falta mucho para que reciban un trato digno y oportunidades laborales bien remuneradas.

"Falta eso, en España, Argentina, hay más apoyos a las empresas que contratan a estos chicos", apuntó.

En 2011, la asamblea de la ONU fijó el 21 de marzo como el Día Mundial del Síndrome de Down.

Mercedes recordó que al nacer Ana se topó con una limitante: no había guarderías que aceptaran a...

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