Guadalupe Loaeza/ ¡Ave María Purísimita!

AutorGuadalupe Loaeza
  1. Ave María Purísima...

    -Sin pecado concebida...

    -¿Cuándo fue la última vez que te confesaste?

    -Hace como tres semanas, padre.

    -¿Cuáles son tus pecados?

    -Me confieso de ser mentirosa, irrespetuosa, no hago mis tareas, soy muy floja, me choca la monja que nos tocó a las de segundo de secundaria, ay, y también, la otra noche tuve malos pensamientos...

    -¿Te tocaste tus partes nobles? ¿Te gustó? ¿Qué sentías? ¿En qué pensabas? ¿En tus compañeras o en tus pretendientes? ¿Te has acariciado con tus amigas? Siendo una adolescente como eres es normal que a veces peques contra la pureza. Por eso quiero que me cuentes, ¿qué sentiste esa noche...? Después de hacerlo, ¿estabas húmeda? Aunque te dé vergüenza, niña, puedes contarme todo, si te acariciabas el busto y la parte de abajo, si al hacerlo pensabas en un hombre o ¿en qué? Del 1 al 10, ¿cuánto te gustaba? ¿Cuántas veces lo has hecho? ¿Seguido? ¿Cuando te lavas por ahí, te gusta? Gracias a la confesión soy el único que te puede salvar del infierno. Mira niña, los malos pensamientos casi siempre conducen a las malas acciones, por eso hay que evitarlos. ¿No quieres llegar virgen al matrimonio? Pero, no has dicho nada, niña, ¿dónde te acariciabas? ¿Tenías la luz apagada o estaba encendida? ¿Te quitaste tu pantaleta o te acariciabas por encimita? Bueno, como penitencia reza cinco Ave Marías, tres Padre Nuestros y 12 jaculatorias. Dile a tu mamá que te ponga a hacer más trabajos manuales. Ahora reza un acto de Contrición.

    -Pero, padre, es que... no me ha dejado hablar... Mis malos pensamientos no eran contra la pureza... más bien tenían que ver con mis deseos de quitarle el novio a mi mejor amiga... También eso es pecado, ¿verdad, padre?

  2. Ave María Purísima...

    -Sin pecado concebida...

    -¿Hace cuánto tiempo te confesaste?

    -Hace como seis meses...

    -Te escucho, hija mía...

    -Ay, padre, pues fíjese que últimamente he estado muy deprimida. No sé qué me pasa... Me siento sola. Tengo muchos problemas en mi casa. No me llevo con mis papás. Además, para colmo, no tengo trabajo, entonces me la paso todo el día en mi casa peleándome con mi mamá y con mis hermanos. Estoy como confundida. Tal vez necesite un novio o un amigo a quien le pueda contar todas mis cosas.

    -¿Cuántos años tienes?

    -Veinte, padre.

    -Tal vez lo que necesites sea unos Ejercicios Espirituales. Sé de unos que imparten unas madres de Tlalpan. Por lo pronto te recomiendo que leas La Imitación de Cristo.

    -Hace tres años lo leo, padre...

    -Ten paciencia...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR