Guillermo Velasco Barrera / Negar la realidad

AutorGuillermo Velasco Barrera

Esta semana que concluye, la calificadora Fitch Ratings fue el destinatario principal de las críticas y señalamientos del Presidente Andrés Manuel López Obrador. El "pecado" de esta firma internacional fue bajar las calificaciones crediticias de PEMEX, dejando a la petrolera mexicana al borde de perder el grado de inversión.

La perspectiva negativa de la paraestatal mexicana, según refiere Fitch, refleja el deterioro continuo de su perfil crediticio, resultado de un flujo negativo de fondos y una subinversión en exploración y producción. Lo anterior, en pocas palabras, se podría resumir en una notable falta de confianza de inversionistas en el ámbito internacional hacia la principal empresa del Gobierno, misma que le significa, aproximadamente, el 30% de sus ingresos.

El tema desde luego no es asunto menor, pues más allá de vehementes discursos a favor de la Cuarta Transformación, la crítica situación de PEMEX, consecuencia de su baja productividad y de la incertidumbre que genera su elevado endeudamiento, podría tener en el mediano plazo consecuencias muy negativas para las finanzas del Gobierno mexicano.

La calificadora Moody`s, hay que decirlo, no piensa cambiar de momento la calificación crediticia de PEMEX y señaló que dará a esta empresa el beneficio de la duda por seis meses más, lo que el Presidente calificó como una medida sensata. Por el contrario, calificó a los funcionarios de Fitch como hipócritas, charlatanes y cómplices de los que saquearon a la empresa petrolera en gobiernos anteriores.

Además, el Jefe del Ejecutivo Federal señaló que esta compañía global de servicios financieros, fundada, por cierto, en 1913, no está tomando en cuenta la "cruzada" contra el huachicol emprendida por el Gobierno, las acciones a favor de la austeridad, y la determinación por erradicar la corrupción en México.

En pocas palabras, "mezclar peras con manzanas" para confundir y no atender los temas de fondo, para negar la realidad y disfrazar la ineptitud con supuestas acciones heroicas que de momento han quedado en el terreno del discurso, en el terreno de la "Fe" que no de los hechos, en el ámbito de una prédica grandilocuente que pareciera transformarlo todo desde la sola voluntad del caudillo.

Estamos de nueva cuenta frente a la recurrente estrategia del...

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