Hablemos de Golf/ Bastones nuevos vs. clases de golf

AutorRafael Alarcón

PANAMA.- Antes de que las computadoras identificaran la flexión de las varillas, los artesanos golfistas de finales del Siglo 19 tenían su propia tecnología, rebajaban el grosor de la madera para darles la flexión requerida.

Esos golfistas tenían la misma meta que los de hoy en día, golpes más largos, bastones que se sintieran mejor, y escores más bajos.

Considerando la infiltración de la tecnología en el golf ¿cuánto realmente nos han beneficiado estos avances, y hacia dónde vamos para ganar unos cuantos golpes?

Hoy en día el swing puede ser analizado por una computadora, los binoculares nos dicen las distancias con gran precisión, las varillas de grafito son más ligeras y resistentes, las cabezas de los bastones se componen de materiales sofisticados, y las pelotas se fabrican para controlar el tipo de vuelo y efecto.

Parece difícil pensar cuánto más van a cambiar los bastones del futuro. Compañías líderes de la industria como Callaway y Taylor Made contratan ingenieros en aeronáutica espacial para descubrir aplicaciones de materiales más ligeros y diseñar nuevos modelos con mayor frecuencia.

Desde que la United States Golf Association (USGA) reglamentó, en 1938, a 14 el número máximo de bastones que el golfista podía usar y en 1948 limitó la velocidad máxima a la que una pelota puede volar, ha sido una constate lucha por mantener el progreso bien reglamentado.

Por más que se piense que los bastones y las pelotas del futuro ayudaran sustancialmente a mejorar los escores, ninguno de estos avances tendrá tanto impacto para el golfista, como los avances en las técnicas de enseñanza.

Los instructores de hoy en día están armados de artefactos de la más alta...

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