Jorge Volpi / La mano de Calderón

AutorJorge Volpi

Aquel 9 de diciembre de 2005 nadie la vio, aunque las imágenes fueron presenciadas por millones. Pero ahí estaba, clarísima, enfundada en un guante negro. Hoy sabemos que la captura y la liberación fueron un montaje o, más bien, una puesta en escena que no ocurrió cuando nos dijeron sino, muy probablemente, el día anterior, y desde luego no como fue transmitida por Sergio Vicke, de TV Azteca, y Carlos Loret de Mola, de Televisa.

Pablo Reinah, el reportero de Primero Noticias, acompaña a un comando de la Agencia Federal de Investigaciones que, pertrechado como si fuera a aventurarse en una zona de guerra, irrumpe en una propiedad del sur de la Ciudad de México. Los policías se adentran en el empedrado y se dirigen hacia una casa al fondo. Misteriosamente, la puerta se abre desde adentro -la abre un hombre con abrigo negro, el dueño de esa mano- y de pronto estamos frente a los presuntos secuestradores, una mujer que grita, con un estruendoso acento francés, que nada tiene que ver en el secuestro, y un hombre sometido por la fuerza.

Siguiendo el guion de la AFI, Reinah se aproxima al joven, Israel Vallarta, quien reconoce haberse encargado de cuidar a las tres víctimas. El reportero insiste, el acusado trastabilla y es entonces cuando la mano con el guante negro adquiere un insólito protagonismo. Para obligarlo a responder, esa mano, hasta entonces posada con apariencia de levedad en su nuca -aquí todo son apariencias-, aprieta ferozmente el cuello de Vallarta, quien se estremece por el dolor. Hasta Reinah se inquieta por un segundo. El detenido se queja por haber sido golpeado y recibe un nuevo apretón de esa misma mano.

Torturar es infligir dolor para obtener información. Vemos, o no vemos, o más bien no nos importa, esta secuencia pavorosa. Unos instantes, en los dos noticieros estelares de la mañana, de tortura en vivo. Hoy sabemos que el hombre del abrigo negro, dueño de la mano enguantada, era Luis Cárdenas Palomino, hombre de confianza del director de la AFI, Genaro García Luna, y responsable de cuanto sucedió en Las Chinitas.

El 5 de febrero de 2006, acorralado por Denise Maerker y Yuli García, García Luna admite, esta vez sí en vivo, que la captura de Florence Cassez e Israel Vallarta fue un montaje. Continúa mintiendo al afirmar que fueron detenidos a las 4 de la mañana, pero sin duda...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR