José Luis Cuéllar Garza / Sembrando patria

AutorJosé Luis Cuéllar Garza

La muerte de don Antonio Leaño Álvarez del Castillo (1916-2010), el pasado 3 de julio, representa la pérdida de uno de los líderes sociales y empresariales más influyentes del siglo 20 jalisciense y el cierre de un largo ciclo que debería estudiarse con la profundidad, objetividad y pasión que el tema merece.

Me aproximo al personaje porque lo que conozco de su biografía y de su obra me convencen que Jalisco, Guadalajara y el Occidente mexicano no se entienden sin las iniciativas que don Antonio encabezó, a veces a contrapelo del poder gubernamental más absoluto, como el ejercido por el gobierno mexicano en la cúspide del Maximato callista.

La biografía generacional de aquellos tapatíos nacidos en las postrimerías de la Revolución, que para el 3 de marzo de 1935 contaba entre 17 y 20 años de edad, estuvo marcada por aquella batalla contra la educación socialista obligatoria que llevó a muchos jóvenes a marcharse a la Ciudad de México y a un puñado de ellos, a arrancar con su sangre al Gobernador Everardo Topete el estatuto de autonomía, que en aquella coyuntura emparentó su lucha con la de Antonio Caso, José Vasconcelos y la propia UNAM. Es un mérito que nadie puede regatear a la que nació en los laboratorios y casas de los propios universitarios, mucho después fue fortalecida con apoyos de la Alianza para el Progreso y apenas hace cosa de dos décadas fue reconocida como la Universidad Autónoma de Guadalajara, la UAG -en la que el Dr. Luis Garibay Gutiérrez fungió como Rector determinante-, de la que han egresado 70 mil profesionistas y donde laboran 6 mil maestros y trabajadores. Una institución altamente prestigiada en diversas disciplinas (donde el Hospital-Escuela de Medicina honra la memoria de su hermano Ángel, generoso compañero de lucha muerto prematuramente), que mantiene el liderazgo en matrícula internacional, la educación deportiva militarizada (fundado el Pentathlón en 1939), varias ramas del conocimiento, la educación continua y los estudios estratégicos.

Don Antonio Leaño fue labrándose una personalidad fascinante y polémica, propia de un hombre de grandes realizaciones. Digno heredero del ingeniero Nicolás...

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