Juan García de Quevedo / Las verdades del PRI

AutorJuan García de Quevedo

A Fernando Santillán Ocampo.

No me sorprenden las protestas, críticas a la dirigencia, culto a la persona -que no personalidad-, huidas a otro partido y sobre todo la dramatización excesiva de las decisiones. En el priismo, en tiempos electorales esto es moneda corriente y sucede elección tras elección. Para encontrar defectos a los candidatos, los priistas son profesionales -claro, a los candidatos de su partido-. Espero que el famoso cuarto de guerra del candidato Jorge Aristóteles esté trabajando en estrategias inteligentes, con un discurso que se traduzca en votos, y para ello es necesario hacer un acopio de información sobre los seis años como Gobernador del hoy candidato Alberto Cárdenas y sus otros tantos años como servidor público y senador de la República. Espero, también, que el famoso cuarto de guerra esté trabajando en las debilidades (que son muchas y evidentes) del candidato Fernando Guzmán.

Recordemos: cuando Cárdenas compitió contra Eugenio Ruiz Orozco no era nadie, y ganó. Hoy aparece como el monstruo político que hará Gobernador a Fernando Guzmán arrasando toda la zona metropolitana. El priismo debería pensar más y asustarse menos. Nuevos perfiles surgen un día y otro también, incluso se menciona que Ruiz Orozco debería ir por la revancha ahora que el priismo está tan bien posicionado y que, como partido, está arriba del PAN en lo nacional y lo estatal.

Lo malo del priismo es que hoy en día, después de tantos años de administrar la Oposición, toman cualquier filtración periodística como argumento a reflexionar y, a los primeros gritos, establecen mesas de negociación. Digamos la verdad del priismo: no existen grupos y menos, personalidades que signifiquen corrientes políticas con sólida presencia electoral. La única figura con fuerza electoral es, hoy por hoy, Jorge Aristóteles. Las figuras públicas que existen son aquellas que ocupan puestos de elección popular y ninguna podría siquiera competirle en popularidad. Los demás son lo de menos.

La historia del priismo es la historia del candidato presidencial frente al que nadie podía existir, más que él. Ahora Enrique Peña, según entiendo, en las encuestas, en las encuestas serias, tiene mayoría más que holgada para iniciar campaña con seguridad suficiente, y lo mismo ocurre en el caso de Jorge Aristóteles. Retrata...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR