Para todos hay lugar
| Autor | Marcela Turati |
¿Qué tienen en común un muerto, dos ecologistas presos, un guerrillero incorporado a la vida política, un sacerdote jesuita y un dirigente indígena priísta? Que todos tienen un lugar hoy en la Cámara de Diputados como invitados especiales del EZLN.
El muerto invitado es Francisco Gómez, "el compañero Hugo", un tzeltal fulminado por las ráfagas en el mercado de Ocosingo al día siguiente del alzamiento zapatista, el 2 de enero de 1994.
Según el libro "La rebelión de Las Cañadas", Francisco era oriundo de La Sultana, un ejido situado en el corazón de la selva Lacandona y había sido presidente de Quiptic Ta Lecubtesel, la más antigua de las organizaciones de Las Cañadas.
"Llevaba casi nueve años en el movimiento. Había sido movilizado con el resto de la gente en el transcurso de la madrugada del 1 de enero, como parte del grupo que comandaba el mayor Mario, a bordo de camiones secuestrados a la ARIC en la comunidad de San Miguel", se lee en el libro de Carlos Tello Díaz.
Hijo de peones de una finca, Francisco aprendió a leer, a contar, a escribir y a dominar el español gracias a los cursos que daban los maoístas en la selva; vivía en una casa de piso de tierra, pared de madera y techo de lámina de zinc; lidereó antes protestas y plantones en las que se pedía solución al problema del campo; fungía a veces como traductor del "subcomandante Marcos" ante los tzeltales.
El priísta.
Rechazado por los zapatistas
El invitado de los zapatistas más polémico, posiblemente, será Enrique Ku Herrera, el ex Diputado priísta, ex secretario de Acción Indígena del PRI e integrante de la Fundación para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas.
En 1998, el indígena maya de Campeche acusó a los extranjeros por influir en el movimiento zapatista y pidió que se les investigara.
En 1999 celebró en un discurso "el compromiso y la voluntad política del Presidente Ernesto Zedillo de cumplir los Acuerdos de San Andrés, al enviar al Senado de la República en marzo de 1998 una iniciativa de Ley en materia de Derechos y Cultura Indígenas". Pero la iniciativa presidencial fue rechazada por los zapatistas.
Sin embargo, en sus discursos el sociólogo nacido en 1958 ha pedido una política indígena de Estado con miras a la paz mediante el diálogo, y en la que los indígenas sean los principales protagonistas.
El jesuita.
Casi casi 'Marcos'
En 1994 un diario publicó que el verdadero nombre del "subcomandante Marcos" era Jerónimo Hernández. La compañía de Jesús se indignó por las...
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