Luis Rabinal González/ Habrá más impuestos
| Autor | Luis Rabinal González |
Hacer del próximo sexenio un ejemplo de muy buen Gobierno es para Vicente Fox y para el PAN un reto que deben cumplir sin excusa alguna o pondrán en riesgo su trascendencia en el poder.
Para ello, el hoy virtual Presidente electo debe consolidar dos logros fundamentales que constituirán cimientos del Gobierno que, satisfaciendo las expectativas y exigencias del electorado, le aseguren a su partido un proyecto presidencial más allá del sexenio con el que se inaugura esta alternancia.
En primer término, Fox deberá -como lo está haciendo- promover acercamientos y negociaciones con todos los sectores y grupos que hasta la fecha han sido actores protagónicos del devenir de México en los últimos cincuenta años. Esto con la finalidad de concertar un "déjame trabajar, apóyame o al menos no estorbes, y quédate tranquilo que no habrá cacería de brujas, sólo borrón y cuenta nueva".
Aunque, como en todos los tiempos y lugares, los acuerdos fraguados en los centros del poder no forman parte de lo público y muchas veces culminan en afectaciones a los intereses de sus pueblos, es mi opinión que en este momento histórico debemos reconocer que es una gran fortuna que Vicente Fox pueda negociar, y que negocie, pues de no ser así, a este País le llegarían las turbulencias propias de las transiciones políticas que se derivan de una violenta pugna por el poder. Ejemplos los hay muchos en el orbe.
En segundo término, Fox necesita dinero, dinero para financiar la reinvención de la administración pública federal que le corresponde dirigir. Cumplidas estas dos premisas básicas, Fox contará con un punto de partida que le posibilite intentar un Gobierno que no decepcione al electorado mexicano. Me permito ocuparme en este artículo de la segunda de las premisas invocadas.
Es una verdadera desgracia, pero así es. Cualquiera que hubiera sido Presidente encontraría este escenario tan terrible, el de un País con una administración pública en bancarrota, obsoleta y entrampada por los vicios y deficiencias acumulados en años. Si el PAN y Fox desean demostrarle a la Nación un ejemplar Gobierno tendrán que generar acciones que conlleven soluciones inmediatas a los gobernados, y estas acciones no pueden articularse desde otro lugar que no sean las dependencias que conforman a la administración pública. Por lo que si no se provee a estas instancias de recursos económicos suficientes para que operen con eficiencia, simplemente, no podrá haber buen Gobierno, al menos no habrá un...
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