Un malo muy bueno

AutorMario Abner Colina

ENVIADO

LOS ÁNGELES.- Bien podría ganarse la vida interpretando a galanes maduros en el cine, pero la vida quiso que el australiano Ben Mendelsohn sea llamado una y otra vez en Hollywood para hacer sufrir a los protagonistas.

El actor ha interpretado a villanos incompetentes y retorcidos, arrogantes y siniestros, en una serie de títulos entre los que destacan Exodus, Rogue One, Animal Kingdom y Black Sea.

A futuro, será la pesadilla de la Capitana Marvel en la próxima película de la superheroína y hará la vida imposible de Robin Hood como el temible Sheriff de No-ttingham.

Y a partir de mañana aparecerá en las pantallas como Nolan Sorrento, el malvado jefe de un corporativo que quiere privatizar Oasis, el juego de realidad virtual que es eje en Ready Player One, la distopía de Steven Spielberg.

"¿Qué obtengo de interpretar a los malos? Un buen cheque, y muchos besos. Estarían sorprendidos de cuántas quieren besar a los malos. No hay nada mejor", bromea el actor de 48 años.

"Interpretar villanos es interesante porque lidias con un campo más común de emociones humanas: villanía, los celos, ambición, odio, venganza, enojo. Son más comunes que las que son opuestas. Y son geniales para interpretar", remata ya con seriedad.

El histrión asegura que atesora como pocas experiencias la oportunidad de trabajar con Spielberg en un "blockbuster...

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