Manuel J. Jáuregui / Lo uno o lo otro

AutorManuel J. Jáuregui

Realmente sólo hay dos interpretaciones racionales que se le puedan aplicar al caso de Jorge Hank Rhon, detenido y liberado, como los Alcaldes de Michoacán, "por falta de pruebas".

La primera, y más obvia, es que la PGR carece de la capacidad para armar bien sus acusaciones -y hablamos jurídicamente, no mediáticamente- por lo que de acuerdo con lo que consta en los expedientes (que es lo único que el juez puede tomar en cuenta) no se fundamenta el delito imputado, o mejor dicho, no se le puede imputar el delito cometido -si es que lo hubo- al acusado.

La segunda interpretación (que es la oficial) sería que la PGR sí presenta acusaciones sólidas, fundamentadas, pero que son desechadas por los jueces a causa de: a) Intimidación. b) Corrupción. c) Presión política. d) Una combinación de los tres anteriores factores.

Estarán de acuerdo, que en ambos casos, fuere la causa que fuere, el resultado para el concepto de la justicia es el mismo, ya que conduce a idéntico destino aunque sea por caminos diferentes: la impunidad.

No sólo en el caso de Hank Rhon, o los Alcaldes de Michoacán, o en muchos otros, sino en general esta bochornosa situación que se repite al dar la PGR un golpe fallido indica que algo no funciona en el sistema jurídico mexicano.

Ya sea porque el Ministerio Público no cumple con habilidad y apego al derecho sus funciones, o por fallas en los juzgados, el resultado es exactamente el mismo: no hay justicia.

Si los policías son malos, o incapaces o corruptos y no arman bien los expedientes; o si los jueces atienden factores externos que no son los que deben inclinar el fiel de la balanza de la justicia, como quiera nos han quedado cuando menos dos indicios claros, inequívocos, de que la justicia en México simplemente no existe: el hankazo y el michoacanazo.

Lo que nos queda, pues, es un sistemucho viciado, pestilente, en el cual los culpables salen libres y muchos inocentes se pudren en nuestras hacinadas cárceles (verbigracia: "Presunto Culpable").

Salta a la vista que una Nación que no cuenta con un sistema de justicia operante, confiable, eficiente que administre la justicia de manera expedita y certera, tiene necesariamente que considerarse un "Estado fallido".

Un Estado que no puede administrar la justicia incumple con una de sus...

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