La menor importancia / Sin conexión

AutorJosé Israel Carranza

Es obvio que, en las actuales circunstancias, dependemos grandemente de contar con conexión a Internet para poder trabajar (siempre que la naturaleza de nuestras actividades permita el llamado home office) y para estudiar. Pero nos hemos precipitado de modo tan abrupto en esta realidad que acaso no parezca tan obvio que dicha conexión es indispensable sólo para esas dos actividades: para todo lo demás sigue estando a nuestra disposición el mundo análogo, por mucho que ahora su existencia misma parezca tan dudosa o tan incomprensible.

(Un paréntesis acerca de la acotación que hice, «en las actuales circunstancias»: aun cuando agoreros de todo signo proyecten que este tiempo anómalo se prolongará mucho, o indefinidamente, tanto como para que lo excepcional que tiene acabe trocándose en la famosa «nueva normalidad», siempre habrá razones para descreer de esos vaticinios.

Por ejemplo ésta: los ejércitos del mundo no pueden coexistir con eso que se ha dado en llamar «distanciamiento social». Las potencias no van a renunciar a tener ejércitos; por tanto, el remedio o la vacuna tienen que estar generándose a una velocidad que no imaginamos a fin de que los cuarteles puedan seguir existiendo -jamás conoceremos la tasa de contagio en los ámbitos militares-, y así no es improbable, ni mucho menos, que sea por ahí por...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR