Meridiano/ México y Sudamérica
| Autor | David Peñalfaro |
Cuando entró en vigor el Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá, esa misma noche en que arrojaban fuegos artificiales en Los Pinos, y mucho menos artificiales en Chiapas, se empezaba a gestar un sentimiento especial en Sudamérica con relación a nuestro país. Por decidir unir nuestros destinos con nuestros vecinos de norte, aceptar las arras, hacer las promesas y votos correspondientes, en ciertos sectores de varios países del Cono Sur se nos acusó de pro yanquis, de vendidos, de hacer jirones y pisotear el "Sueño Bolivariano" de una América Latina unida.
En fin, el asunto se puso triste, y como en tango parecían decirnos: "Nada debo agradecerte, mano a mano hemos quedado, no me importa lo que has hecho, lo que hacés, ni lo que harás, los favores recibidos creo habértelos pagado y si alguna deuda chica sin querer se me ha olvidado, en la cuenta del otario si querés me la cargás".
De alguna manera tenían razón, ya que después de unos cuantos años hablando y hablando de la cercanía con nuestros hermanos latinoamericanos, y de lo importante de nuestras raíces en común y bla bla bla, habíamos decidido hacer la fiesta con los vecinos ricos, pero no somos los únicos en el mundo en dar esa clase de bandazos, ya que al parecer así gira la rueda de la fortuna de la globalización, en donde lo que brilla es el oro y no las mezclas de sangre o la historia.
Y así, nos hicimos parte del NAFTA, socios privilegiados de la economía más grande del mundo. Orgullosos íbamos por la vida mostrando carnet de OCDE y de otros clubes exclusivos a los que se nos dio entrada. En este sentido, no deja de ser curioso que siempre que hablamos de los bloques comerciales en el mundo mencionamos el Asiático, el Europeo y el de América del Norte, dejando así a muchas regiones del mundo sin cobijo comercial, pero así nos las gastamos en estos tiempos de mercado libre. Olvidamos, sin darnos cuenta, a otras importantes regiones del mundo, como Sudamérica, Centroamérica, el Caribe o Africa por mencionar sólo algunos países.
Es por eso que el viaje de Vicente Fox al Cono Sur puede llegar a tener una gran importancia. Hasta ahora en la mayoría de los medios de comunicación han resaltado las cuestiones personales, los eventos y las anécdotas, pero lo importante de este viaje al Sur de la Tierra es que estamos volviendo a levantar la mano para decir que estamos presentes y formados en la fila, y que estamos dispuestos a incrementar el comercio entre nuestros...
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