Miradas plásticas
| Autor | Rebeca Pérez Vega |
Las mujeres no siempre han tenido un papel protagónico en los escaparates de las artes plásticas en el País. Aunque el talento es mucho, la presencia femenina no se ha reflejado de manera equitativa en el circuito del arte, pero eso empieza a cambiar poco a poco, advierten artistas que este lunes protagonizarán la exposición "Siete con Siete".
La muestra, que tomará los muros de la galería Vértice Bruna, hace una revisión del trabajo de las artistas Gabriela Arévalo, Indira Castellón, Rocío Coffeen, Marisela Esqueda, Paulina Goca, Lucía Torres y Rita Vega.
Todas son o han desarrollado su trabajo en Guadalajara y la constante en su trabajo es la diferencia: son de generaciones distintas y exploran temas tan variados como el carnaval, el viaje, la exploración con los materiales, el juego con elementos oníricos, la figura, la presencia femenina, hasta escenas surreales o la experiencia personal.
"A los hombres se les abren más fácilmente las puertas, en realidad nunca he entendido por qué, hay hombres con una gran trayectoria y muy pocas personas voltean a ver a las mujeres, que muchas tienen mucha más carrera, por eso me gusta compartir los muros con otras seis mujeres, me gusta que sean mujeres para hacer más fuerza, para presentarnos, mostrar todo lo que el lado femenino trae", manifiesta Lucía Torres, tapatía nacida en 1983, quien desde hace más de una década ha trabajado sobre la idea intangible que rodea a los seres humanos, desde sus luchas internas, fracasos y esperanzas.
Para Gabriela Arévalo (CDMX, 1964) tampoco ha sido sencillo. La artista ha tenido que tocar puertas en infinidad de veces para poder conseguir espacios para exhibir su trabajo que ya suma casi tres decenios.
Es hija del pintor Javier Arévalo, pero eso no ha sido necesariamente una ventaja, añade la artista, quien se hizo una carrera en las artes del País a partir de sus propuestas, no de su parentesco.
"Quiero mucho a la Ciudad, pero finalmente Guadalajara es tierra de machos, por eso me parece muy significativo que estemos siete mujeres exponiendo nuestro muy particular y personal modo de interpretar el arte, que se nos abran las puertas así es magnífico, eso quiere decir que la sociedad tapatía reconoce más el arte hecho por mujeres.
"Independientemente de lo que mucha gente cree, que ser hija de un artista abre puertas, también te las puede cerrar, hay muchos prejuicios; he tenido que picar piedra, tocar puertas para abrirme espacios, me siento muy orgullosa de la...
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