Muestran desesperación

AutorMiguel García

Ellos protagonizan uno de los casos más extraños en el balompié nacional, debido a que la Selección Mexicana cuenta con ellos, pero ni siquiera presencian los partidos de las Chivas desde la banca.

Ignacio Hierro y Alvaro Ortiz, integrantes del representativo nacional en las copas Carlsberg y de Oro, viven momentos de confusión y desesperación, al no estar considerados por Ricardo Ferretti dentro del grupo que encara los compromisos del Verano 2000.

Tras un vertiginoso inicio, la carrera del ex americanista dio un sorpresivo giro; medallista de oro en los Juegos Panamericanos de Winnipeg y uno de los firmes candidatos para ocupar el lateral izquierdo del Tri, Hierro sólo ha participado en un partido de la presente Liga, ante los Pumas en la Jornada 2.

"Realmente sí siento desesperación, pero no me queda otra cosa que seguir entrenando, esperar una oportunidad. Así ha sido mi carrera, tengo regularidad en un torneo y en el siguiente no, tal vez sea algo que yo tenga que analizar en lo personal", expresó el lateral, quien sólo ha participado en 27 minutos en la actual campaña.

Los problemas económicos del Rebaño Sagrado, sus escasas apariciones en el primer equipo y algunos problemas físicos hacen pensar al defensa que sus días en la Perla Tapatía están contados.

"Es muy probable que al finalizar mi contrato, cuando el torneo termine, yo salga de aquí, debido a los problemas económicos que tiene Guadalajara y a otras cosas; yo estoy a préstamo, y mi destino no sé dónde esté. Debo aprovechar el Preolímpico y las Olimpiadas de Sydney para que algún equipo se fije en mí", reconoció Hierro, quien el pasado fin de semana vistió la camiseta del Nacional Tijuana, de la Primera A.

Esperaba la titularidad

Cuando Jesús Arellano se marchó al Monterrey, los ojos de Ortiz brillaron porque pensaba que el puesto que quedaba vacante sería para él. El ex mediocampista del León sí obtuvo la titularidad, pero en la filial del chiverío en la División de Ascenso.

"Pensé que yo iba a ocupar el lugar de (Jesús) Arellano, pero afortunada y desgraciadamente me mandaron llamar a la Selección y perdí varios partidos. Como el equipo funcionó muy bien y no tengo tanta jerarquía, pues me quedé esperando", manifestó el medallista de oro en Winnipeg 99.

"La Selección ayuda muchísimo, es un escaparate, pero en este caso a mí me quitó un lugar en Chivas", afirmó.

Esta situación también fue vivida en 1993 por el portero americanista, Alejandro "El Gallo" García.

Luego de...

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