Niegan tortura a McCain

AutorÁngel Villarino

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HANOI, Vietnam.- ¿Fue realmente torturado John McCain en la celda número 13 del "Hanoi Hilton", la prisión militar vietnamita donde pasó cinco años y medio? ¿Se comportó como el héroe patriota que narra su autobiografía? El comandante vietnamita a quien se atribuye la autoría de los maltratos físicos niega ambas cosas.

Es más, Nguyen Tien Dan dice con una media sonrisa que el candidato republicano le debe la vida.

"Nació dos veces. La primera cuando dio a luz su madre y la segunda cuando lo llevamos al hospital después de sacarlo del lago de Truch Bach, donde cayó su avión abatido".

"Yo me encargué personalmente de los interrogatorios, pasé día y noche con él. Le hicimos preguntas, por supuesto, tres veces por semana, pero sin violencia, sino con sutiles técnicas psicológicas", insiste el viejo comandante.

"Sin golpes se consiguen muchas cosas. Hay trucos para que los presos aislados te digan lo que quieres. Luego se contrasta con los testimonios de sus compañeros y se presiona. Eso es todo", abundó Nguyen, quien no esconde que se ejerciese presión para sonsacar confesiones y utilizar los testimonios de los presos con fines propagandísticos.

Frente a esta poco conocida versión de los hechos, se suele dar por cierta la del candidato republicano, quien narró lo opuesto, forjándose una leyenda de la que se ha servido durante toda la campaña electoral.

McCain dijo haber sido apaleado por los vietnamitas y tan brutalmente torturado que incluso habría intentado suicidarse en un par de ocasiones para poner fin a los tormentos.

Según esta misma versión, fue gracias a los repetidos maltratos físicos que sus captores consiguieron quebrar su voluntad y hacerle firmar un falso testimonio en el que el hijo del almirante se declaraba un "oscuro criminal" y admitía que los vietnamitas le habían salvado la vida.

Un documento que algunos de sus compañeros de cautiverio se negaron a firmar.

"Yo no recuerdo ningún intento de suicidio. (McCain) comía con ganas y siempre pedía sus medicinas. Era muy patriota, eso sí, y defendía los motivos de la guerra, pero sabía dónde se encontraba, se portaba bien y nos obedecía", aseguró el carcelero. La versión de los oficiales vietnamitas tampoco está libre de sospecha.

A sus 75 años, Nguyen sigue vistiendo ropas militares, es un convencido defensor del régimen y vive de la pensión de 300 dólares al mes que le pasa el Ejército, una suma nada despreciable para la realidad de este país del Sudeste Asiático.

En un...

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