Nombres, Nombres y... Nombres / Falta de recursos y atribuciones limitan a la CRE

AutorAlberto Aguilar

LE ADELANTABA de la expectativa en torno a la designación del funcionario que ocupará la presidencia de la Comisión Reguladora de Energía (CRE). Entre los nombres está el panista, actual presidente de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados, Francisco Javier Salazar, a quien algunos ven con muchas posibilidades.

También los subsecretarios Héctor Moreira y José Alberto Acevedo, cuyo expertis los hace elegibles, así como los comisionados Francisco Barnés de Castro y Jorge Ocejo, que a decir de los que saben tienen pocas probabilidades. Tampoco parece haber señales para que se vuelva a elegir a Dionisio Pérez-Jácome.

Le comentaba del desencanto que hay de la IP en torno a la CRE, y en general con lo poco que se ha logrado en esta Administración para mejorar el entorno en el que hoy se mueve una industria fundamental.

La visión del Estado ha sido muy corta. Tan sólo considere que en esta Administración van cuatro Secretarios de Energía, ninguno con la especialización requerida, esto es, Ernesto Martens, Felipe Calderón, Fernando Elizondo y Fernando Canales Clariond.

El Congreso tampoco ha ayudado. Se habla de autonomía, pero en lo que va del sexenio la partida presupuestal para la CRE pasó de 203 millones de pesos del 2000 a 110 millones en 2005. Su plantilla es de 137 personas y de éstas, 60 son los especialistas.

Al mismo tiempo las atribuciones de la CRE están limitadas por la propia ley. Como con la CFC, de Eduardo Pérez Motta, el cobro de cualquier sanción es punto menos que imposible.

En el sexenio ha quedado pendiente la reforma a su ley para darle a esa entidad mayores atribuciones regulatorias. Ni siquiera opina en un tema tan fundamental como las tarifas eléctricas.

Tampoco puede normar la calidad del servicio que ofrecen la CFE, de Alfredo Elías Ayub, y LyFC, que lleva Luis de Pablo, ni injerir en los tiempos de interrupción, plazos de conexión, cortes y reconexiones, niveles de tensión, etcétera. Es imposible que intervenga en lo que es el despacho del famoso Sistema Eléctrico Nacional.

Aprovechando el programa de mejoras regulatorias que empuja Cofemer, de Carlos García Fernández, ahora mismo se trabaja en una serie de medidas para transparentar, costos y criterios que sigue la CFE para despachar la energía.

El entorno político para el sector eléctrico igual ha sido difícil. Considere la incertidumbre generada por algunos senadores, especialmente el poblano Manuel Bartlett, que ha sido muy nocivo para este rubro.

Aún así...

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