Obesidad infantil

AutorAndrea Menchaca

Mientras que Estados Unidos logró reducir sus tasas de obesidad infantil en una década, en México la prevalencia está estancada.

Las autoridades federales del país vecino revelaron que del 2003 al 2011 disminuyó un 43 por ciento la tasa de obesidad en niños de entre 2 y 5 años de edad, bajando del 14 a 8 por ciento.

En México, en contraste, la prevalencia tiende a estabilizarse, pero no se puede presumir una reducción importante en cuanto a las tasas de obesidad infantil.

La Encuesta Nacional de Salud 2012 indica que la prevalencia en la República Mexicana de sobrepeso y obesidad en escolares de 5 a 11 años de edad fue de 34.4 por ciento, sólo 1.1 por ciento menos que en el 2006.

Incluso, el documento señala que en menores de 5 años se ha registrado un ligero ascenso de 7.8 por ciento en el año de 1988 a 9.7 por ciento en el 2012.

"A pesar de que no hubo aumento durante los últimos seis años en la prevalencia de peso excesivo en la edad escolar, la cifra continúa siendo inaceptablemente alta, dadas las graves consecuencias que acarrea el exceso de peso", subraya la encuesta.

PROBLEMA A FUTURO

Elizabeth Solís, especialista en el área de nutrición, advierte que el problema de obesidad y sobrepeso implica costos para el sistema de salud por la atención que van a requerir estos menores de edad, ya que el padecimiento es una enfermedad crónica.

"Un 70 u 80 por ciento de los niños van a ser adultos con obesidad y un adulto con obesidad va a desarrollar diabetes o un problema cardiaco o hipertensión", manifestó la nutrióloga.

"Es un problema de magnitud, tiene trascendencia y tenemos que enfatizar más las acciones de prevención para seguir controlándolo y finalmente revertirlo".

FALTAN ACCIONES

Aunque en la última década hay más programas para combatir la obesidad infantil, ¿por que no ha logrado reducirse?

Luisa Martínez, nutrióloga del programa del Niño y Adolescente del Instituto de Bienestar Integral del Centro Médico Zambrano Hellion, señala que hay una falta de cultura en materia de alimentación saludable y actividad física a nivel individual y familiar.

La especialista agrega que hay una exposición y disponibilidad tan fuerte a alimentos y bebidas azucaradas que a veces la ingesta energética de los niños sobrepasa sus requerimientos.

Existe un abuso al consumo de alimentos densamente energéticos y pobres en nutrientes, agrega, y muchos niños están reemplazando la actividad física por las actividades sedentarias.

También, añade, hay una...

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