Ocasiona violencia trastornos a vecinos

AutorMURAL - Staff

La ola de violencia que existe en ciertas colonias de la Ciudad genera mayor vulnerabilidad entre sus habitantes, quienes podrían comenzar a sufrir diferentes tipos de trastornos o incluso, tomar justicia por sus propias manos.

Lo anterior es la perspectiva del jefe del departamento de Clínicas de Salud Mental de la Universidad de Guadalajara, José de Jesús Gutiérrez Rodríguez, quien piensa que las actividades criminales trastocan la vida vecinal.

Ante las imágenes de violencia o la información a las que están expuestas las personas por los asesinatos, éstas pueden desarrollar trastornos por estrés o problemas de ansiedad.

Estos desórdenes, a largo plazo, causan problemas para desarrollar relaciones interpersonales, laborales o escolares, explicó el especialista.

"No salimos tan tarde en la noche y (hay que) andar con cuidado en la calle", dijo un vecino de la Colonia Lagos de Oriente, la cual encabeza el número de muertes violentas en Guadalajara.

Si los asesinatos no son castigados existe otra consecuencia.

"El sujeto que los comete puede volver a presentar estas conductas delictivas y las personas inocentes que viven en estas zonas críticas son más vulnerables en convertirse en víctimas", expresó el especialista.

Además, Gutiérrez Rodríguez aseguró que los crímenes obligan a los integrantes de una comunidad a modificar conductas con tal de garantizar su seguridad, aunque sea por encima de la ley, pues es generalizada la desconfianza hacia las autoridades.

"Hay que andar bien truchas, está bien ca... aquí la raza está ca... hay muchos lacrillas", expresó Iván, vecino de la Colonia La Gigantera, la cual registra el mayor número de homicidios en Tlaquepaque.

Todo eso lleva a un estado de indefensión que puede orillar a las personas a tomar medidas.

"Lo que puede suceder, es que muchas personas busquen hacer justicia por propia mano e inclusive que tiendan a desarrollar actitudes de linchamiento contra personas que les parezcan delincuentes y, en aras de su seguridad, agredir" agregó Gutiérrez Rodríguez.

En las colonias más afectadas por la estadística en Zapopan, la Constitución y Tabachines, la inseguridad ha sido una constante desde hace más de un año, pues el patrullaje se incrementa sólo después de que ocurre un hecho violento, indicaron residentes.

"Mi mamá antes les daba refrescos (a los policías), hasta una vez que les pidió que vieran a unos tipos que se veían sospechosos aquí a la vuelta, le dijeron que sí, pero no fueron", comentó...

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