Opinión Invitada / ¿Qué cambiará a partir de hoy?

AutorOpinión Invitada

Alejandro Hermosillo González

En 1999, la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró al 12 de agosto como "Día Internacional de la Juventud". La sola idea de tener un día de reconocimiento mundial emocionó a muchos, especialmente a los más ilusos. Uno pensaría que tener un día propio en el calendario traería beneficios directos a la calidad de vida del dueño de esa fecha, pero es entonces cuando surge la pregunta, ¿en qué nos beneficia a los jóvenes que exista un "Día Internacional de la Juventud"?

Mi respuesta a ella es simple: en nada. Actualmente tenemos días de casi todo. Hace poco fue el "Día Mundial de la Leche", el "Día de los Gatos", y como esas, hay otras muchas celebraciones que bien pudieran existir o no, sin efecto alguno.

Lo que podría lograr que un "Día de" fuera realmente importante es que éste viniera cargado de reflexión, propuesta y acciones. Sólo así podríamos decir que existe un impacto real, material y terrenal en la vida de los afectados. Desafortunadamente esa condición queda sujeta a la voluntad personal de los que están en el tema de juventud y sólo se modificará y mejorará en la medida en que más y más jóvenes nos involucremos, y cuando en vez de preguntar al líder o autoridad en juventud ¿qué hará para celebrar este día?, le preguntemos ¿qué cambiará a partir de este día?

Hoy, hay cerca de 1.2 millones de personas en todo el mundo que tienen entre 15 y 24 años y que pueden ser considerados actores claves en las áreas de crecimiento económico, fuerza política y transformación social. Hace 20 años ese número rondaba por la mitad. Es innegable que los jóvenes estamos arrebatando posiciones importantes en la empresa, en la política y en la sociedad. La orientación del mundo hacia las tecnologías hace que los jóvenes, los que mejor entendemos de modernidad, nos convirtamos en piezas clave de la nueva era.

Sin embargo, este vuelco de los jóvenes por ganar terreno no ha encontrado una respuesta del todo positiva del mercado. Después de la crisis económica mundial se han visto efectos negativos sobre los ingresos, las finanzas públicas, los mercados laborales, la salud y el acceso a la educación para este sector.

Es ahí donde los jóvenes hemos demostrado no ser los mismos de antes. Aprovechando la rapidez de la comunicación actual, hemos comenzado a hacernos...

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