A oscuras en L. Cárdenas

AutorFernanda Carapia

Circular por Lázaro Cárdenas de noche es como jugar a la suerte con el destino y llevar las de perder cuando está lloviendo.

La falta de balizamiento y de alumbrado hacen que los conductores, literalmente, manejen a ciegas.

El tramo más peligroso está en Tlaquepaque, del Nodo Revolución a Fuelle. Ahí no hay lámparas funcionando y no hay división de carriles.

Esto provoca que los conductores circulen por donde mejor les convenga, lo cual se complica más con una lluvia intensa.

La caída del agua en el parabrisas impide una visibilidad efectiva y hace casi imposible dividir el arroyo vehicular.

A esto se suma el mal estado en el pavimento. El agua tapa los baches que quedan totalmente escondidos a la vista.

Pese a la inversión del Ayuntamiento de Tlaquepaque para mantener en un estado regular los carriles tanto centrales como laterales a la altura de la Expo Ganadera, los baches resurgen y con cada lluvia se hacen más profundos.

"Es muy estresante porque no se ve nada y cuando llueve es peor, un día va a haber un accidente muy fuerte y todo por la negligencia de las autoridades porque es responsabilidad de ellos balizar y...

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