Cómo ser papá de un 'papacito'

AutorKaty Díaz

Fotos: José Quintero

Siempre le había gustado eso de la artisteada, pero fue hace como nueve años cuando Eduardo Verástegui se decidió a convertirse en cantante y actor profesional.

Abandonó la carrera de Derecho que estaba estudiando a petición de su papá y dejó atrás a su familia en su natal Xicoténcatl, Tamaulipas, para ir a buscar su sueño en la Ciudad de México.

Por supuesto que dicha noticia no fue muy del agrado de su padre, José Verástegui Treviño, quien tenía otros planes para su hijo. Nunca había imaginado que su primogénito, su único hijo varón, el mayor de cuatro hermanos, el que él veía como abogado, terminaría sobre un escenario cantando y bailando frente a las cámaras fotográficas y de televisión.

"Yo le puse muchas trabas, yo quería hacerlo reventar. No me gustó nada que se fuera a México en la búsqueda de su sueño, se fue contra mi voluntad, así que le quité toda la ayuda económica, le quité todo mi apoyo porque yo pensaba que eso era una cosa efímera, que era una locura de juventud. Creí que quería ser artista por la onda del glamour, por ser popular, pero me dije: 'no va a aguantar'", recuerda don José, quien es ingeniero agrónomo.

Pero con el paso del tiempo la dedicación y el esfuerzo de su hijo le demostraron que ser artista no era sólo una locura juvenil, era una ilusión que Eduardo deseaba con todas sus ganas y que poco a poco fue logrando.

Su primer logro lo obtuvo al ser aceptado en el grupo Kairo, con el que viajó alrededor del País y el extranjero.

"Yo tenía mucho miedo de que Eduardo entrara a ese ambiente por lo que nos llegaba de información. Todo lo del medio artístico yo lo relacionaba con cosas muy malas y no quería eso para mi hijo. De hecho todavía estoy un poco renuente, no es lo que yo había planeado para él, pero como me dijo en una ocasión: 'tú hiciste planes con mi vida pero a mí no me tomaste en cuenta', y bueno, ahí me desarmó", explica el papá de Eduardo.

Por su parte, el actor de Alma Rebelde entiende y respeta la opinión de su padre, pues al ponerse en sus zapatos cree que él haría lo mismo si, en un futuro, un hijo le saliera con la locura de que quiere convertirse en artista.

"Yo estoy de acuerdo en que lo que hice fue una locura. Dejé mi carrera de Derecho para irme a México sin conocer a nadie, sin tener nada...

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