Pasaría vida en la cárcel

AutorMURAL / STAFF

El resto de sus días en prisión pasaría el reo del Reclusorio Preventivo de Puente Grande acusado de asesinar a su pareja y dos hijos cuando se encontraban de visita.

Como cada domingo, Erika Isela Velázquez Cocula había llevado a sus hijos de 1 y 4 años para visitar a su padre, el ex elemento de la Policía Rural en Zapotlanejo, Domingo Villa Arellano.

El ex oficial había sido condenado por parricidio y violación, tras asesinar a su anterior pareja a puñaladas, quemar su cuerpo y violar a la hija de ella, en abril de 2006, informó la extinta Procuraduría de Justicia en ese entonces.

Tras estos crímenes, Villa Arellano confesó que lo hizo por celos al descubrir que su mujer lo engañaba.

El pasado domingo, el interno llevó a su familia -incluida su hijastra de 17 años- a una habitación de visita conyugal, en el área de servidores públicos, con el pretexto de protegerse del frío, reportó la Fiscalía General del Estado.

Unos minutos pasaron en el cuarto y la hijastra del ex agente salió corriendo hacia unos custodios de la prisión, sangrando del pecho y pidiendo ayuda.

Tras revisar el módulo 2 del dormitorio 14, los uniformados localizaron sin vida a los pequeños y a la concubina, sobre una cama; además, Villa Arellano había tratado de quitarse la vida y estaba gravemente herido.

Las autopsias revelaron que las víctimas fallecieron por heridas hechas con un trozo de alambre, según el acta 339/2015 del Servicio Médico Forense.

En la escena del crimen, además, había un pedazo de rafia y un trozo de cable, con los cuales supuestamente trató de asfixiar a las víctimas, explicó la sobreviviente.

Mientras se encuentra hospitalizado en una clínica del IMSS, Villa Arellano continúa bajo investigación nuevamente bajo los cargos de parricidio.

El Código Penal considera de 25 a 45 años de prisión por ese tipo de crimen, además de sancionarse con dos terceras partes de los castigos por la tentativa contra la joven.

Sin contar la sentencia previa, si Villa Arellano enfrenta un juicio por el triple homicidio podría salir de la cárcel a los 85 años de edad, de recibir la máxima condena.

La Ley dice

El Código Penal del Estado establece:

ARTÍCULO 223

Se impondrán de 25 a 45 años de prisión al que dolosamente prive de la vida al cónyuge o a cualquier ascendiente o descendiente consanguíneo en línea recta o colateral hasta en cuarto grado, hermano, concubina o concubinario, adoptante o adoptado.

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