PLAZA PÚBLICA / Las crisis del PRD

AutorMiguel Ángel Granados Chapa

La mayoría de los militantes y los votantes del Partido de la Revolución Democrática no merecen el descrédito que la actual crisis depara a esa organización. No lo merece tampoco la todavía incipiente democracia mexicana, que requiere de un potente partido de izquierda. La corrupción de buena parte de los cuadros dirigentes del PRD, que se ejerce cotidianamente y se abulta en coyunturas en que se disputa el poder, como el actual proceso electoral, no corresponde a la condición ética de la mayor parte de quienes son sus miembros y votaron el 16 de marzo pasado. Esa diferencia entre el grueso de la militancia y sus dirigentes deviene en amplia medida de la conversión de la política como responsabilidad en la política como negocio y modus vivendi, transformación especialmente dañina en agrupaciones basadas en la solidaridad y la abnegación. Pocos fenómenos tan grotescos y socialmente dañinos como el espectáculo de los quijotes en engorda.

La sola imposibilidad de conocer en definitiva el resultado de la jornada electoral dentro del plazo fijado y la incertidumbre sobre cuándo y cómo terminará el proceso son reveladoras de la crisis perredista. Después de que, tal como se había previsto y conforme a las reglas establecidas, se supo el resultado de dos conteos rápidos, realizados por sendas empresas cuya metodología fue conocida y aprobada por las partes, resultado que en ambos casos favoreció a Alejandro Encinas con hasta ocho puntos de ventaja sobre su principal contendiente, Jesús Ortega, el proceso ha corroborado la evidencia del deterioro perredista. Tras la aproximación estadística ofrecida por los conteos rápidos, los resultados preliminares fueron manipulados y el órgano electoral nombrado ex profeso, encabezado por el antiguo director del IFE, hoy senador Arturo Núñez, se vio en la necesidad de cerrar el programa respectivo. Luego, el miércoles 19 los cómputos estatales se vieron frenados y obstruidos al punto de que al comenzar esta semana se tienen resultados en 20 entidades pero no en 12, por lo que fue imposible realizar el domingo el cómputo nacional. El combate de acusaciones mutuas se ha agravado por la necesidad de que el conteo de votos en ocho entidades se realice fuera de ellas, y no haya podido ser realizado todavía en la sede nacional de ese partido. No se avizora que en las próximas horas las causas del trabamiento en el escrutinio se diluyan, por lo que parece imprescindible una decisión de la Comisión de Garantías, el...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR