Ponle en 22°
| Autor | Juan Antonio Moreno |
Ni tanto que queme al santo, ni tan poco que no lo alumbre.
La aplicación práctica de este dicho da buena cuenta del cuidado que se debe tener al establecer la temperatura en los sistemas de aire acondicionado.
Y es que fijar el termostato de tu equipo por debajo de la temperatura recomendable tiene un alto costo, según expertos.
La regla de oro consiste en mantener el termostato en el rango de los 21 a los 23 grados centígrados en días cálidos.
"En tiempo de calor, el consumo de energía del clima se incremente a razón de 5 por ciento por cada grado que se ajuste el termostato por debajo de lo recomendable", estima Javier Machuca, gerente de ventas de Sensa.
"Mucha gente cree que por el hecho de poner el termostato en 17 grados va a enfriar más rápido y no es así", señala.
"22 grados es la temperatura de confort del cuerpo humano.
"Cuando ponemos la temperatura demasiado baja también corremos el riesgo de provocarnos daños importantes a la salud", advierte Machuca.
De acuerdo con el Fideicomiso para el Ahorro de Energía Eléctrica, FIDE, un nivel aceptable de confort se ubica en torno a los 25 grados centígrados.
Para el Fideicomiso, el impacto que se genera por variar la temperatura es mayor que el que estima Machuca.
Por cada grado que se establece en el aparato por debajo de la temperatura de confort, se estará gastando un 8 por ciento más energía, calcula.
En tiempo de frío, la recomendación es no exceder los 22 grados, sugiere Machuca, de Sensa.
"Fijarlo en 26 grados es demasiado si afuera la temperatura es de cero grados, por ejemplo", explica.
Pero si tu idea es garantizar que nadie le "mueva" al termostato y ahorrar, puedes aprovechar las herramientas que ya ofrecen los nuevos equipos.
"La mayoría de los termostatos digitales tiene opciones de candado.
"Nadie le puede mover mas que el que le haya puesto o sepa la contraseña", refiere Machuca.
MÁS EFICIENCIA
Si estás interesado en adquirir un aire acondicionado, ten en cuenta que los equipos de nueva generación ahorran más.
Con el uso de los sistemas de refrigerante de flujo variable (VRF) o minisplits Inverters se obtienen ahorros de entre un 30 y 40 por ciento en comparación con un equipo convencional.
Algunos de los más innovadores minisplits que hay en el mercado operan bajo estas tecnologías.
Otra ventaja que tienen los aparatos es que en invierno, en el modo de calefacción, pueden trabajar a temperaturas por debajo de los 5 grados bajo cero.
"Un equipo tradicional, ya sea tipo...
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