Presencian un encuentro con preguntas vivenciales

AutorJorge Zul de la Cueva

En Casa Vallarta se conjugan dos búsquedas a través de técnicas y formatos distintos, pero que comparten ciertas características como los laberintos de rugosidades en el óleo y las figuras creadas con surcos que se antojan infinitos.

Se trata de las propuestas plásticas de Marisa Hernández y Pedro Casant, "¿Soy Todo lo que Hay en Mi Cuerpo?" y "Del Encuentro Vivencial al Formato", respectivamente.

En la pintura de Casant pueden verse colores y texturas que hablan de un clima y de un lugar; los densos amarillos y el Mara½akame en bicicleta se remontan a un Nayarit lleno de armadillos y tortugas, de arena y calor, mientras que en Hernández se trasluce un mundo más líquido, más lleno de humedades y de sueños frescos.

"Para mí la pintura es una especie de silencio. Te metes dentro de tí mismo y llegas a un lugar donde las cosas que sabes ya no existen, donde el conocimiento se pierde. Es tratar de ver lo invisible, decir lo indecible en un lugar donde no se puede intelectualizar", comentó Hernández.

Para esto la pintora se sirve de tela, arcilla, barro, yeso, ceniza y todo lo que tiene a la mano.

"Mi referencia es el otro, por eso expongo, para ver qué opina el que ve", agregó.

Sin embargo, la pintora no se preocupa demasiado por exponer, piensa que no se trata de tener el...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR