Prevén con Cassez votación dividida

AutorVíctor Fuentes

MÉXICO.- Los cinco ministros de la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia analizarán hoy un proyecto de sentencia que propone liberar a la presunta secuestradora francesa Florence Cassez, presa desde diciembre de 2005 y condenada a 60 años de cárcel por tres instancias judiciales.

El proyecto, del ministro Arturo Zaldívar, propone liberar a Cassez sin pronunciarse sobre su culpa o inocencia, porque las irregularidades durante su detención, y en particular el montaje televisivo para exhibir su captura, habrían viciado todo el proceso en su contra.

Los ministros han sido discretos en su trato con múltiples interesados que han cabildeado ante ellos en las últimas semanas, y no discutieron el tema en su sesión privada del 14 de marzo, por lo que no hay un antecedente sobre sus posturas.

Pero fuentes cercanas al caso estimaron que la votación será dividida, seguramente con una mayoría de solo tres ministros.

En casos recientes, como los de Acteal, San Salvador Atenco o las indígenas otomíes señaladas por plagiar a agentes de la AFI, la Primera Sala ordenó liberar a acusados que habían sido condenados por instancias inferiores, por vicios de procedimiento que echaron abajo los procesos.

El caso Cassez, sin embargo, tiene una diferencia importante con los mencionados.

La Corte no atrajo el amparo directo de la francesa, que fue negado por un tribunal colegiado de circuito en 2011, sino que los ministros actúan bajo la figura del amparo directo en revisión, donde en teoría solo está permitida la interpretación directa de la Constitución, pero no la valoración de hechos concretos de la acusación.

Esto podría llevar, por ejemplo, a que sólo uno de los varios temas planteados por Zaldívar sea considerado por la mayoría como aceptable para revisión, lo que reduciría el alcance de un posible amparo.

La propuesta

Extractos del proyecto del ministro Arturo Zaldívar sobre el caso Cassez

EL MONTAJE

- "Florence Cassez fue expuesta repetidamente y en profundidad a un espectáculo que resulta inadmisible en un sistema democrático de derechos y libertades. Nadie que hubiese visto la televisión ese día (9 de diciembre de 2005) y durante los meses siguientes, podría negar que tal espectáculo fue, para los miles y miles de ciudadanos que lo vieron y oyeron, el auténtico juicio de Cassez. Cualquier proceso judicial realizado después, en la que víctimas y testigos fueron expuestos tan a fondo a este montaje, no podría ser más que una mera formalidad".

EFECTO...

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