'Profanan' santuario
| Autor | Adán García |
Corresponsal
TZINTZUNTZAN, Mich.- Sin importar que se trate de un sitio sagrado para los purépechas, las camionetas blindadas que transportaban a funcionarios rodaron por los terrenos del Antiguo Convento Franciscano de Santa Ana, en Tzintzuntzan, Michoacán.
Las restricciones que nativos, Ayuntamiento y autoridades de conservación han impuesto para proteger el lugar, cuya construcción data de finales del Siglo 16, tampoco valieron.
El jueves pasado, el convoy de seis pesadas unidades tomó como calle la restaurada calzada de piedra volcánica, hasta detenerse frente a la cruz atrial edificada en 1764 y que ostenta grabados los símbolos pasionarios de Cristo, como los clavos, la escalera y la corona de espinas.
Del vehículo punta descendieron los Gobernadores de Quintana Roo, Roberto Borge; de Tlaxcala, Mariano González, y el anfitrión de Michoacán, Fausto Vallejo, convocados a una reunión de la Comisión de Turismo de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago).
Atrás de ellos llegaron los Mandatarios de Colima, Mario Anguiano; de Yucatán, Rolando Zapata, y de Hidalgo, José Francisco Olvera, miembros de la misma Comisión.
Las unidades, en total 10, se desplazaron enseguida sobre los jardines del atrio donde sobrevive un conjunto de Olivos que, según historiadores, fueron plantados hace más de 500 años y que los indígenas cuidan como un tesoro.
Elementos del Estado Mayor Presidencial y escoltas estacionaron los vehículos frente a la Capilla Abierta, donde los lugareños conservan una pila bautismal de inmersión el Siglo 16.
Luego irrumpió otro convoy con tres camionetas cerradas, que trasladaban a la Secretaria de Turismo federal, Claudia Ruiz Massieu y su comitiva.
La funcionaria bajó de las unidades hasta los pies del viejo convento, una concesión que ni la Reina Margarita II se tomó durante su visita a este sitio patrimonial el 22 de febrero del 2008, acompañada del Príncipe Consorte, Enrique de Laborde, y del entonces Presidente Felipe Calderón.
Josefina Larios Rodríguez, vicepresidenta estatal de la organización Adopta una Obra de Arte, recordó que en esa ocasión la guardia Presidencial preguntó si podían ingresar los vehículos al atrio y no los metieron.
"Nosotros aquí (al atrio), de ninguna manera, jamás, se mete un auto. Este es un atrio que se utiliza solamente para las festividades religiosas, y es un atrio que es un lugar, de alguna manera, sagrado y que hay que respetar y que todos respetamos", expresó.
Pero el jueves, los...
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