Raúl Fuentes Navarro/ La(s) identidad(es) de los tapatíos
| Autor | Raúl Fuentes Navarro |
Tal vez la imaginación no sea tan arbitraria como a veces la suponemos. Y las identidades no son otra cosa que productos de la imaginación. Los individuos y las colectividades a las que pertenecen se imaginan a sí mismos para distinguirse de otros, a quienes también asignan identidades imaginadas. Y al imaginarse con ciertas características distintivas, los individuos y las colectividades a las que pertenecen se reconocen como entes particulares, que actúan como tales. Tratan de ser como se imaginan y casi nunca se dan cuenta de que en realidad se imaginan como son, como han sido. Porque la distancia entre la imagen y la realidad tiene límites muy prácticos: si crece demasiado se convierte en un desajuste patológico. No podemos imaginarnos radicalmente distintos de lo que somos y no podemos ser de otra manera que no sea una que imaginamos, o que imaginan otros acerca de nosotros. Las identidades de los individuos y de las colectividades a las que pertenecen son, por eso, imágenes al mismo tiempo fieles y distorsionadas, estables y cambiantes, puentes entre el pasado y el futuro, entre lo que somos y lo que podemos ser.
Las identidades son seguramente los productos de la imaginación con mayor importancia práctica para los individuos y las colectividades a las que pertenecen. Gracias a ellas tiene sentido usar términos como "yo" y "nosotros", forzosamente distintos en algo a "los otros". Así, el gentilicio "tapatíos" funciona como designación de un "nosotros" marcado por la pertenencia a la colectividad que habita Guadalajara, y es útil para distinguir a esa colectividad de otras. En el tiempo, esa designación imaginaria ha servido para construir una particularidad bien definida, que sin embargo es objeto de pugna al interior de la colectividad que se reconoce en ella. En el espacio social, la capacidad de imponer la imagen de la propia identidad, y las de otros, es una manifestación del poder. De esta manera, las imágenes identitarias, como el uso del gentilicio "tapatíos", expresan intereses y condiciones diversas, dependientes de quién las invoque. Hay, entonces, muchas maneras de imaginar y de ser tapatíos.
Para facilitar el reconocimiento de ciertos rasgos de la identidad de una colectividad, se crean y adoptan imágenes simbólicas o emblemáticas. La forma de las torres de la catedral, por ejemplo, condensa tradicionalmente la referencia a Guadalajara; el tequila, la música de mariachi y la charrería, representan simbólicamente no sólo a...
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