Rebanadas / De visita en Zafferano Italian
| Autor | Cony De Lantal |
Fui expresamente a Plaza Pabellón siguiendo el anuncio de Umami, que a decir de quién sabe qué revista del jet set mexicano, llevaba 15 días de apertura. Pregunté por el local y nadie supo decirme dónde era, recorrí de principio a fin la plaza y ni sus luces.
En la búsqueda platicaba con mi esposo sobre lo diferente que luce la plaza, en realidad las razones por las que seguimos visitándola son casi las mismas, tiendas Massimo Dutti, Mix Up y el mismo Chilis (que es de mis favoritos). En realidad debe ser inquietante para los pequeños locatarios el vacío que se siente.
Terminamos en el corredor de comida rápida y como primera opción estaba Carls Jr, pero seguimos caminando y al final encontramos Zafferano Italian Deli. El local combina su estrategia de venta, lo mismo ofrece carnes frías por kilo, frascos de pepinillos, pimientos en salmuera y aceitunas, que paninos preparados y ensaladas.
El estilo Deli, muy socorrido en estos tiempos, casi al nivel del sushi, te hace comer hoy en día muy al estilo europeo, digamos que más que deli parece fusión. Y es que en mi muy modesta experiencia, jamás probé en Italia panini con mayonesa o crema, sin duda americana, ni con el mexicanísmo chipotle.
Lo que me dio confianza del lugar fue lo prolijo de su cocina, característica indispensable en la gastronomía.
Me decidí a probar una chapata Cicerone, a base de pechuga de pollo a las finas hierbas, con champiñones, queso mozzarella, de 48 pesos. Me pareció un poco fría la pechuga, lo que me hizo pensar que no la prepararon al momento.
De sabor estaba equis, así que como buena comida rápida, cumplió con su función de mitigar el hambre sin dejar una grata experiencia gastronómica.
Para ganar tiempo y clientes ponen a disposición el teléfono 3120-6048 para pedir desde el camino y la orden estará lista cuando llegues.
Nueva dirección, pocos avances
Fuimos a la nueva dirección de la Casa del Waffle en Pablo Casals 616, casi esquina Manuel Acuña y nos reencontramos con el que he considerado un buen lugar para desayunos.
No sé por qué cambiaron de dirección, pero el nuevo lugar es más espacioso. Eso sí, con poco estacionamiento, pero como llegamos muy tarde estacionamos el auto en una de las calles cercanas y no hubo mayor problema.
Todo sigue bien, pero creo que hay algo que debo comentar y me pareció innecesario. Llegamos cerca de las 12:30 horas y mucha gente seguía sentada en las mesas compartiendo con la familia.
La recepcionista nos hizo esperar un poco...
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