Entrevista/ Rogelio García Castro / Guardián del clima
| Autor | Pedro Mellado |
- Por errores, Guadalajara perdió la temperatura ideal
- Es pionero de la investigación sobre contaminación
- Las bondades del Lago de Chapala y de La Primavera
Cuando su abuelo le llevó por primera vez a observar los astros a través de un telescopio, bajo la sabia guía del célebre astrónomo y meteorólogo Severo Díaz Galindo, su vida quedó marcada para siempre. Nunca ha podido olvidar la profunda emoción que experimentó cuando pudo ver a través de la lente la pequeña esfera de Saturno, adornado por sus luminosos anillos.
Fue durante décadas el guardián del clima en Guadalajara. Nuestra Ciudad perdió, afirma, ese eterno y maravilloso clima primaveral del que todavía se podía disfrutar hasta antes de la década de los años 80, cuando los termómetros oscilaban entre los 14 y los 26 grados centígrados como temperaturas mínima y máxima, respectivamente.
Considera que en forma absurda hemos causado graves perjuicios al medio ambiente.
Es pionero, junto con su maestro Enrique Flores Tritschler y sus compañeros José Briseño Muñiz y Ernesto Chávez, en los estudios de la contaminación ambiental, los problemas del Lago de Chapala y del Bosque La Primavera, e impulsores del aprovechamiento de la energía solar, mediante el uso de paneles solares.
Ingeniero astrónomo, con especialidad en meteorología, Rogelio García Castro nació en Guadalajara el 22 de noviembre de 1941. Está casado con Yolanda González Bustos, con quien procreó siete hijos: Yolanda Martina, Laura Beatriz, Sysi Patricia, Rogelio Paul, Juan Carlos, Juan Daniel y Christian Alejandro. Entre todos les han dado 10 nietos.
Guarda singular devoción por su alma mater, la UdeG, donde fue investigador y director del Instituto de Astronomía y Meteorología, hasta el día en que se jubiló en 1994. También fue director del Planetario de Guadalajara de 1997 al 2000.
Tiene en su casa una enorme diversidad de piedras, minerales, artefactos y pequeños fósiles, producto de su afición por la geología, la arqueología y la paleontología.
EL NIÑO
¿En qué momento, cuándo, dónde y por qué razón le surge la inclinación por la astronomía y la meteorología?
Cuando tenía unos 6, 7 años, tuve curiosidad por ver a través de un telescopio. Yo me crié con unos abuelos y tanto di lata que llegó un día, un fin de semana, en que mi abuelo -Gonzalo García- me llevó a Instituto de Astronomía y Meteorología de la Universidad de Guadalajara.
El Instituto de Astronomía inició sus funciones en marzo de 1926, siendo su primer director el padre Severo Díaz Galindo, a quien tuve el honor de conocer. Don Severo era un gran meteorólogo, sin que en su tiempo existieran los...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba