Rubén Romero / ¿Es objetivo o consecuencia?

AutorRubén Romero

El año que termina dejó una enseñanza a los organizadores de las carreras de México: La participación es más la consecuencia del enfoque del evento que el resultado de un objetivo mercadológico.

Si el objetivo del organizador es alcanzar (o presumir) una gran participación, se puede pensar en implementar medidas comerciales como ofrecer descuentos de última hora o ampliar el tiempo que estará abierta la meta.

Por el contrario: si el objetivo del organizador es atender de mejor manera las necesidades y los intereses de los corredores, lo que debiera hacerse es orientarse a "producir" lo que será la mejor "experiencia" del deportista.

Dave McGillivray, el director operativo del Maratón de Boston, aseguró que "lo que más me motiva es saber que los participantes regresen a casa con el sentimiento de haber disfrutado el evento y de haber crecido como personas y como corredores".

Lo que McGillivray no dijo fue: "mi motivación es organizar el maratón de mayor participación en el mundo", ni "que mi maratón sea el "Top x del planeta".

Es más fácil es medir la cantidad de participantes en una carrera que cuantificar el nivel de satisfacción que experimentaron los corredores.

Es más fácil presumir (y en ocasiones "inflar") las cifras de inscripción que comunicar las emociones que los...

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