Sepultan el viejo ritual
| Autor | Claudia Guerrero, Claudia Salazar y Armando Estrop |
MÉXICO.- Mientras el Ejecutivo y el Congreso sepultaban ayer el viejo ritual del informe presidencial, el PRI estableció un nuevo modelo para el 1 de septiembre.
Las condiciones para la entrega física del documento fueron negociadas por las bancadas del tricolor, quienes pidieron al Ejecutivo enviar a un representante presidencial del nivel del Secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, en lugar de un funcionario de la Consejería Jurídica, como lo había propuesto el PAN.
El Gobierno federal aceptó.
El encargado de la política interior arribó a las instalaciones a la Cámara de Diputados en punto de las 11:00 horas, tal y como fue citado.
La ceremonia se llevó a cabo en el salón de Protocolo del Palacio Legislativo de San Lázaro, justo como lo dispuso el nuevo presidente de la Cámara de Diputados, el priista César Duarte, quien incluso ordenó retirar de la mesa el micrófono que se había colocado al presidente del Senado, el panista Gustavo Madero.
El acto de entrega apenas duró cinco minutos y Mouriño tuvo que entrar y salir de las instalaciones legislativas sin operativo de seguridad de por medio y sin cierre de calles, tal como el tricolor lo sugirió.
Al recibir el Segundo Informe de Gobierno, el legislador priista presumió el formato republicano de la entrega y recordó al funcionario que el Congreso hará valer sus facultades para hacer efectiva la rendición de cuentas.
"Esté cierto el Ejecutivo Federal que habremos de cumplir a cabalidad con nuestra responsabilidad en este nuevo momento que vive la nación en la transformación de sus instituciones, pero sobre todo en el compromiso de la rendición de cuentas, de la transparencia y del manejo más claro, cercano a la ciudadanía, de los asuntos que le corresponden en responsabilidad al Ejecutivo federal", sostuvo.
Frente a algunos integrantes de las mesas directivas de las cámaras de Diputados y Senadores, Mouriño aseguró que en el Gobierno se mantendrán al pendiente de los requerimientos del Poder Legislativo.
Durante el breve acto, los diputados, senadores y el propio encargado de la política interna fueron presas del nerviosismo.
Sin aparente claridad en el procedimiento de entrega, el informe se paseó por varias manos antes de ser sostenido frente al pecho de Mouriño para la posada fotografía.
Tras la entrega, el titular de Gobernación se retiró del lugar flanqueado por una improvisada comitiva de diputados panistas.
Duarte se trasladó a sus nuevas oficinas ubicadas en la presidencia...
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